De las opciones escogidas por las empresas en 2017, más de un tercio del apoyo recibido se ha destinado a programas de nutrición, seguido de proyectos de escolarización de niños en primaria. Otros campos específicos como el acceso a salud y los programas de generación de empleo también han estado en el top de donaciones de la empresa privada. Además, el 30% de las contribuciones recibidas provienen de programas regulares y se destinan al trabajo en emergencias: son los proyectos más apoyados por las empresas a través de sus contribuciones al trabajo de ACNUR.
Fundaciones, gran consumo y retail, mayores donantes privados de ACNUR
Sin embargo, los sectores que decidieron apoyar a los refugiados en todo el mundo fueron, en este orden, fundaciones bancarias, gran consumo y retail, a través de diferentes acciones de responsabilidad social en las que cada vez es más común contar con el apoyo de clientes y empleados. Esta nueva tendencia convierte el acto filantrópico en un ejercicio que involucra a todos y consigue multiplicar su impacto.
Si hablamos del programa de entidades que colaboran regularmente, los sectores más implicados son las actividades administrativas, artísticas, sanitarias y de servicios sociales, y el sector de la construcción.
En cuanto a los destinos geográficos elegidos por las empresas españolas, África y Oriente Medio, las regiones con mayor número de personas refugiadas y desplazas, fueron a su vez los que más ayuda recibieron, seguido de Asia y la crisis de refugiados en Europa.
RSC: un valor seguro para llegar a los millenials
En sólo seis años, la inversión en RSC de las empresas se multiplica por cuatro. Esta tendencia se ve respaldada por las empresas españolas, que han aumentado su compromiso, especialmente desde la sonada crisis de refugiados en el Mediterráneo en 2015.
Gracias a su apoyo al trabajo humanitario, la imagen de estas marcas se ve reforzada, aumentado la confianza entre los grupos más jóvenes, quienes aseguran tener cada vez más en consideración la acción social para decantarse por un producto o servicio.
El 9% de las contribuciones de ACNUR provienen de fondos privados, con tendencia a aumentar.Además, todos los colaboradores del Comité español de ACNUR son seleccionados de forma cuidadosa, gracias a un estudio ético y del perfil de sostenibilidad social antes de crear una alianza con una entidad del sector privado, y sometiéndonos, además, a auditorías internas y externas. Pasar a formar parte de las empresas colaboradoras con ACNUR es una garantía de ética y responsabilidad.
Impacto a gran escala
Gracias a las colaboraciones de entidades solidarias, es posible llevar al colegio a niños que lo han perdido todo, entregar raciones diarias de comida, asegurar un control médico y nutricional, además de proveer de infraestructuras duraderas gracias a pozos, centros de salud, saneamiento, y, lo más importante, un refugio bajo el que cobijarse.
Para conocer las formas de colaboración con empresas y fundaciones, ponte en contacto con el Comité español de ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, en empresas@eacnur.org
