Según la juez, ha quedado "indiciariamente acreditado" que este máster se usaba "como regalo o prebenda" a alumnos "con una posición relevante en el ámbito político, institucional o que mantenían vínculos estrechos de amistad o de carácter profesional" con el catedrático Enrique Álvarez Conde, principal implicado en la trama.
Como Casado es aforado, la juez, tras llevar a cabo una investigación "en todo aquello que no implica actuaciones procesales", acuerda enviar la pieza separada abierta por el máster de Casado al Supremo por los indicios de "responsabilidad penal" y "de criminalidad". "Indicios que podrían acreditar su atribución a la persona aforada y su calificación jurídica", añade Rodríguez-Medel.
Los pasos que la juez "considera imprescindibles para el esclarecimiento de los hechos" son: citarle como imputado, pedirle toda la documentación que conserve del máster —los cuatro trabajos que esgrimió ante la prensa, correos electrónicos y acuses de recibo "que evidencien que fueron efectivamente elaborados"— y solicitarle el ordenador portátil donde supuestamente se encontraban archivados estos cuatro trabajos. Rodríguez-Medel duda de su veracidad.
La juez sospecha que Casado cometió un delito de prevaricación administrativa —como cooperador necesario— y otro de cohecho impropio. En esta línea, la magistrada insiste en que el líder del PP tuvo una participación "activa" en el entramado para obtener su título, al entregar la documentación para lograr el diploma.
Esta decisión se produce después de que el pasado viernes acabase una semana clave en el Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid. Tras escuchar a las tres alumnas que se sacaron el título como el dirigente popular, les imputó prevaricación administrativa a las tres y cohecho impropio a una de ellas, Alida Mas Taberner, entonces subsecretaria de la Generalitat valenciana en la etapa de Francisco Camps. La situación de estas tres estudiantes es similar a la del presidente del PP: consiguieron el máster sin ir a clase y con multitud de convalidaciones. Una de ellas admitió, además, que le dieron el diploma sin hacer nada.
La magistrada señala la existencia de un grupo de alumnos privilegiados, a los que se les permite convalidar multitud de asignaturas solo por ser licenciados. En cambio, al resto de estudiantes —"licenciados en su gran mayoría" y que "compatibilizaban con sus trabajos" el curso— "nadie les informa de esta posibilidad que tan ventajosa les resultaba para obtener el máster". "Debe destacarse esa misma mecánica en otras ediciones", añade, en referencia a la promoción de Cifuentes. Ese grupo de "escogidos" tampoco acudía "nunca a clase", pese a que la juez concluye que el máster era presencial.
Reaccion de Casado y el PP
"En absoluto me he planteado dimitir", respondió Pablo Casado en la rueda de prensa convocada esta mañana de lunes en la sede del partido tras la decisión de la juez de trasladar al Supremo. El líder popular ha negado "cualquier irregularidad" en su máster y se ha presentado como víctima de una persecución política: "Lo que me han hecho a mí, no se lo han hecho a nadie en este país y en ningún otro. No estoy siendo investigado por ningún tribunal y no recae sobre mí ningún indicio de culpabilidad".
Casado ha insistido en que la investigación del máster que cursó en 2008 es "totalmente irrelevante". La juez considera, sin embargo, que pudo ser "un regalo académico" dada su "relevancia política e institucional". El presidente del PP ha negado tajantemente que fuera un regalo. "Era un curso de doctorado que habilitaba a escribir una tesis, que finalmente, no hice por falta de tiempo. No tengo ningún título para colgar en ninguna pared y no conocía a las personas que podían haber dado ese regalo". El líder popular ha asegurado que, en cualquier caso, en aquel momento no tenía capacidad para beneficiar a la universidad. "No era nadie, más que un diputado autonómico sin capacidad de hacer nada en la Administración".
Sin referirse al caso Cifuentes y otros en el PP, si mencinó Casado "titulaciones ficticias del líder del PSOE en Madrid, una tesis doctoral del presidente del Gobierno desaparecida…", al mostrarse extrañado porque su máster estuviera causando tanto revuelo. "Llevamos cuatro meses de escrutinio exhaustivo de un curso. ¿Es normal que el Supremo tenga que recibir un caso por un curso de hace diez años por presuntas irregularidades que estarían prescritas y que en todo caso no se cometieron?", lamentó.
El líder popular reivindicó su victoria en el Congreso del PP y lanzó "un mensaje de tranquilidad a todos los miembros del PP". "Si no tuviera la absoluta certeza de que no hice nada incorrecto no me habría presentado". La decisión de la juez se produce apenas dos semanas después de su elección como nuevo presidente popular y le ha obligado a retrasar este lunes su viaje a Colombia, donde tiene previsto asistir a la toma de posesión del nuevo mandatario, Iván Duque, y reunirse con tres presidentes latinoamericanos.
Casado evitó criticar a la juez que ha elevado la causa al Supremo, pero ha asegurado que a partir de ahora ya no padecerá la "indefensión" que a su juicio, ha sufrido hasta ahora.
En las últimas semanas, todo su núcleo duro, empezando por el nuevo secretario general, Teodoro García, ha minimizado la investigación llevada a cabo por la juez Carmen Rodríguez-Medel. "Es una cuestión anecdótica y menor. Quedará en nada", declaró el número dos del PP.
El líder del partido conservador ha basado también parte de su defensa en que enseñó públicamente los cuatro trabajo que hizo para el curso. Pero la juez los pone en duda. "En la rueda de prensa del 10 de abril de 2018 exhibió unos documentos que podrían corresponderse con dichos trabajos. A juicio de esta instructora, lo decisivo no es solo que se aporten los mismos, sino, a falta de una evidencia documental de su entrega en aquel año, resulta esencial corroborar que se elaboraron efectivamente en ese año académico 2008-2009", apunta Rodríguez-Medel, que señala que una "sencilla" intervención de la policía judicial permitiría saber cuándo se crearon esos documentos.