La realidad es que el 73,2% de los jóvenes en esta situación quieren trabajar, un porcentaje que sólo supera Italia por cuatro décimas y que muestra la gravedad de una situación que se explica principalmente por la falta de expectativas a futuro.
Una situación que la pandemia ha agravado ya que también nos ha confirmado como el país con mayor tasa de paro juvenil en 2020.
En España este problema ha evolucionado según la coyuntura económica. Así, tras la crisis financiera ha mejorado a ritmo muy lento y no ha vuelto a los niveles previos de la crisis financiera.
De hecho en 2019 sólo se había bajado hasta el 8,7%, dos décimas más que el mínimo de 8,5% registrado en 2006. Sin embargo el impacto de la pandemia ha sido menor. El motivo es doble.
Líderes en abandono escolar
En primer lugar, en 2020 no veníamos de una burbuja como la de la construcción antes de 2007, que incentivó a muchos jóvenes a abandonar sus estudios por encontrar un empleo.El fuerte incremento en los años siguientes se debió a que muchos de ellos lo perdieron.
Por otro lado, el abandono escolar se ha reducido mucho en España en los últimos años. No obstante, seguimos liderando el ránkig europeo ,sólo superados por Malta, un país con casi cuatro veces menos población que Madrid.