viernes,19 agosto 2022
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ABC yLA RAZÓN defienden las reformas ante críticas del resto

La población activa española, al mínimo de 10 años, y el debate se centra en si hay triunfalismo

Redacción
Los datos del mercado de trabajo en 2016 centran este viernes un debate en la prensa impresa sobre si hay triunfalismo por parte del gobierno al valorar otra vez los datos como históricos, cuando la creación de empleo se desacelera, la población activa baja a mínimos de los10 últimos años y aún faltan 2,3 millones de ocupados para alcanzar el nivel previo a la crisis iniciada en 2017. Los grandes diarios españoles eluden recordar que la mayoría de los países desarrollados ya tienen más empleo.

El número de desempleados bajó en 541.700 personas en 2016, hasta situar la cifra total de parados en 4.237.800, la menor de los últimos siete años, según la Encuesta de Población Activa (EPA) publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Además de la caída del desempleo, que dejó la tasa de paro en el 18.63% de la población activa, la más baja desde 2009, la ocupación se incrementó hasta 18.508.100 personas, 413.900 más que en 2015.

El número de ocupados aumentó en menor medida de la que se recortó el de desempleados, debido a que la población activa se redujo en 127.800 personas durante 2016, hasta alcanzar las 22.745.900 personas, la menor cifra de activos en diez años. De esta forma, la tasa de actividad (personas que trabajan o buscan empleo sobre el total de la población) bajó hasta el 58,95%, la más baja en diez años.

En términos trimestrales, el paro se redujo en 83.000 personas en los últimos tres meses de 2016, mientras que la ocupación se recortó en 19.400 empleados. Durante el año pasado el paro disminuyó en todos los sectores, empezando por los servicios, con 79.600 desempleados menos; la construcción, con 35.600 menos y la agricultura, con 5.100, mientras que la industria se mantuvo casi plana, con 500 menos.

El principal descenso del desempleo se dio entre los parados de larga duración, que perdieron su puesto de trabajo hace más de un año, con 382.000, al tiempo que se redujo el de aquellos que buscaban su primer trabajo, con 38.900. Por sexos, el descenso del paro fue mayor entre los hombres, con 292.500 menos, que entre las mujeres, con 249.200 menos, lo que dejó un mayor número de mujeres desempleadas, con 47.600 más, acorde con su mayor tasa de paro, un 20,25%, tres puntos superior a la masculina.

Por edad, el desempleo se redujo en 2016 en todos los tramos, pero en mayor medida entre las personas de 25 a 45 años, con 432.300 menos, mientras que por nacionalidad disminuyó en mayor medida entre los españoles, con 427.100 que entre los extranjeros, con 114.600.

Por regiones, los mayores descensos del número de parados durante 2016 se dieron en Cataluña, con 110.200 personas menos; Andalucía, con 78.000 menos y Madrid, con 73.700 menos, mientras que sólo se registró un ligero incremento en Extremadura, con 900 personas más.

El número de asalariados se incrementó en 396.600 personas, gracias al aumento de los contratados temporales (226.700 personas) y, en menor medida, a los indefinidos (169.900 personas), lo que la subida de la tasa de temporalidad fue de un 26,47%.

Preguntado por estos datos, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, valoró la evolución del empleo en 2016 e hizo hincapié en la necesidad de seguir manteniendo la misma política económica para conseguir el objetivo de 20 millones de ocupados en 2020.

La ministra de Empleo, Fátima Báñez, calificó los datos de la bajada del paro al cierre de 2016 de "históricos", tras lo que explicó que muestran el fortalecimiento de la recuperación del empleo en España". Desde la CEOE, se apuntó que la EPA refleja una consolidación de la mejora del mercado laboral, aunque, al mismo tiempo, la tendencia es más moderada. El presidente de ATA, Lorenzo Amor, apuntó: "la sequía normativa ha pasado factura al empleo y a los autónomos, cuyo conocimiento fue un 40% inferior al registrado en 2015". UGT y CCOO celebraron los datos, pero aseguraron que la creación de empleo se sustenta en la temporalidad y en la precariedad del mismo.

 

Por otro lado, el ministro de Economía, Luis de Guindos, dijo que la mejora del empleo en 2016 es consecuencia del crecimiento económico de España y de las políticas económicas aplicadas en el país. "España está creciendo. La creación de empleo es la consecuencia del crecimiento económico, de la corrección de desequilibrios macroeconómicos", apuntó.

Valoraciones editoriales de los grandes diarios impresos españoles

Aumenta la precariedad en España, resalta J.C. DÍEZ.en EL PAÍS , único gran diario que no editorializa sobre el asunto español considerado mas prioritario por todos los demás: "España necesita un nuevo plan de inversión europeo, aumentar el número de empresas que exportan y su tamaño, y "un nuevo marco de negociación colectiva que permita un mejor reparto del crecimiento de los beneficios".

La caída de la población activa exige atención prioritaria por parte del Gobierno (EL MUNDO): Aunque "no cabe el triunfalismo", ya que en 2016 se han generado menos puestos de trabajo que en el ejercicio anterior, "es indiscutible que nuestro país ha dejado atrás los durísimos momentos de la crisis". "El Gobierno tiene razones para sacar pecho en esta materia, porque las reformas aprobadas a lo largo de la pasada legislatura se han demostrado como un eficaz instrumento para revertir la situación y volver a la senda de la creación de puestos de trabajo". "En un momento en el que nuestro sistema productivo sigue afectado por importantes desequilibrios y aún nos estamos recuperando de las sacudidas de la recesión, sería una frivolidad tumbar una reforma laboral que, como confirmó ayer la Encuesta de Población Activa, está dando sus frutos". Inquieta que hasta el 56% de los desempleados lo son de larga duración, lo que indica las dificultades de un enorme sector de la población española para reincorporarse al trabajo. También la importante caída de la población activa, hasta la cifra más baja en la última década, una cuestión "que exige atención prioritaria por parte del Gobierno", porque tendrá "efectos serios en la viabilidad del sistema de pensiones, ya zarandeado por muchos desequilibrios". La EPA también confirma que "la creación de trabajo sigue dependiendo sobre todo de los servicios de muy bajo valor añadido". El viraje del sistema productivo de un país "no se hace de un día para otro. Pero urgen señales de que se está trabajando en esa dirección".

La reforma laboral ha funcionado (ABC): "España encadenó en 2016 su cuarto año consecutivo reduciendo el paro y el tercero generando trabajo, lo cual refleja la fortaleza y solidez de la recuperación, así como el acierto de las reformas emprendidas durante la anterior legislatura". Se ha recuperado cerca de la mitad del empleo perdido desde el pinchazo de la burbuja. "A este ritmo, España está en condiciones de alcanzar el umbral de los 20 millones de trabajadores para 2020". Tanto el crecimiento como la creación de empleo "no son fruto de la casualidad ni de la mera existencia de una coyuntura más o menos propicia, sino el resultado directo de los ajustes y las reformas estructurales aprobadas". La mayor flexibilidad laboral, la reducción del déficit, el saneamiento del sistema financiero, la mejora de la competitividad y la estabilidad política son los pilares que sustentan e impulsan la recuperación. "Los principales partidos políticos tienen la obligación de negociar y acordar nuevas medidas para corregir posibles errores y seguir mejorando, pero sin revertir ni anular las reformas que han posibilitado el drástico cambio de rumbo de la economía española".

Huir de los triunfalismos y mejorar la calidad del empleo (LA VANGUARDIA): Habrá que afinar las políticas económicas y laborales actuales para mejorar la situación y confiar también en el acompañamiento de una buena coyuntura internacional para poder llegar a los veinte millones de empleos en 2020, como pretende el Gobierno, desde los 18.508.100 ocupados que hay en la actualidad". La desaceleración en la creación de empleo registrada en 2016 "no es un síntoma excesivamente preocupante pero sí lo suficientemente significativo como para huir de los triunfalismos y mantener la guardia alta del conjunto del país en la creación de empleo y en la mejora de su calidad como principal prioridad". Los partidos políticos "deberían esforzarse por ofrecer un clima de pacto y de confianza económica, en lugar de infundir incertidumbre legislativa, muy nociva para la creación de puestos de trabajo, e impulsar políticas de empleo más eficaces que las actuales". En la misma línea sería necesario "el impulso de una política de reindustrialización del país, con un decidido apoyo a la investigación y la innovación, donde las universidades y los centros de conocimiento pudieran desempeñar un papel más activo en conexión más directa con las empresas". Es decir, "adoptar una política económica, industrial y social más centrada en la creación de ocupación de calidad y asociada a la evolución de un modelo productivo competitivo y con mayor valor añadido.

El paro baja, las causas subsisten (PERIÓDICO):El 18,63% de paro es "un buen dato", que "conviene acoger con esperanza pero sin ningún triunfalismo, porque no puede disimular que el telón de fondo sigue siendo un mercado laboral débil, injusto e invertebrado". La excepcional temporada turística del verano pasado "explica buena parte del incremento del empleo en el sector servicios", pero se trata de "puestos muy poco cualificados, que sirven para mejorar las estadísticas pero no para avanzar hacia la ocupación de alcance estratégico basada en la formación, que es la que necesita nuestra economía". La creación de empleo "no es ajena a la disminución de la jornada laboral media". Si a eso unimos la precariedad, la temporalidad y los falsos autónomos, "la radiografía de nuestra realidad laboral presenta aún muchos más motivos para la preocupación que para el conformismo". España "debe revisar las reformas laborales que han hecho más injusto y dual el mercado de trabajo y que han cargado en las espaldas de los asalariados casi todo el precio de la crisis". Con la revolución de la robótica, el empleo – sobre todo estable y de calidad – será un bien cada día más preciado y, sin un gran pacto social y político que lo ponga alcance de todos, nuestro fracaso como colectividad será más que probable".

El empleo, reflejo del crecimiento (LA RAZÓN): Desde 2013, España ha recuperado dos millones de los empleos perdidos durante la crisis, "apoyándose fundamentalmente en la empresa privada". "Ni la tasa de temporalidad es superior a la que había antes de la crisis ni la contratación indefinida es excepcional". El hecho de que la caída del desempleo se mantenga en los últimos tres años sucesivamente "es señal de que la recuperación de la economía española está consolidándose y no sólo a efectos macroeconómicos". "Incluso más significativo que la recuperación de los indicadores económicos es el hecho de que estos operen sobre una nueva base productiva más sólida, flexible y competitiva, fruto del proceso de reformas llevado a cabo por los gobiernos de Mariano Rajoy". Una política "que debe consolidarse para que la economía española no vuelva a ser nunca más una máquina de destrucción de empleo en cuanto soplaban vientos de crisis". "Se equivoca la oposición en sus insistencia en revertir leyes que están dando buenos resultados, como la reforma laboral o la unidad de mercado, para volver a las viejas fórmulas ineficaces".El empleo urge más yacimientos que el sector servicios CINCO DÍAS): (La tasa de actividad ha bajado hasta el 58,95%, la menor en diez años. Hacen falta más yacimientos de empleo. El sector servicios es el gran protagonista y suma hoy en el turismo "un notable bocado prestado, pero no asegurado". Además de insistir en el factor calidad, "hay que no deshacer lo que funciona, promover el emprendimiento con un marco incentivador en el que el precio de la energía y la burocracia no sean frenos e impulsar el sector privado, verdadero creador del empleo y su sostenibilidad".

 

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