El reportero experto en identidades falsas se camufla ahora entre ´ciberdelincuentes´ en ´Los hombres que susurraban a las máquinas´. Antes, el famoso Antonio Salas presentó ´Operación Princesa´ tras los ensayos ´Diario de un skin´, ´El año que trafiqué con mujeres´, y ´El Palestino´. En la nueva obra se pueden leer afirmaciones como las que siguen:
"El satélite que estábamos a punto de hackear pasaría sobre nosotros a las 5:17 a.m. Forcé lavista intentando localizarlo entre las estrellas. El hacker había comenzado su investigación fabricándose una antena con un palo de escoba y unos radios de bicicleta. Después perfeccionó el sistema con una antena direccional y un conector específico.
?Esto nos calcula el efecto doppler?Falta 1 minuto y 30 segundos? Pasará a 875 kilómetros de altitud y a 7.430 kilómetros por hora? Va a aparecer justo por allí ?me dijo mientras señalaba con el dedo algún punto enel horizonte, sin dejar de teclear comandos para mí indescifrables, y susurraba a la máquinacomo el amante que intenta seducir a su amada.Conecté la cámara de vídeo para grabar el instante en el que rompía la seguridad delsatélite e interceptaba sus comunicaciones??Ya estamos dentro?Mientras te sientes seguro en la intimidad de tu cuarto, o con tu teléfono móvil en el bolsillo,se producen un millón y medio de ataques informáticos al día. La mayoría de nuestrosteléfonos y ordenadores ya están infectados. Los ladrones de vidas buscan suplantar tuidentidad en redes sociales, acceder a tus fotos y vídeos, utilizar tu red wifi y tus correos paracometer delitos que la Policía te atribuirá a ti… Pero eso solo es la punta del iceberg?Durante los últimos años he conocido a hackers de sombrero blanco, gris y negro, aciberactivistas y ciberpolicías. A espías que utilizan las redes para robar información y a los yihadistas que distribuyen en ellas su propaganda. He explorado la Deep Web y el negocio de la pedofilia; y he comprendido cómo la ciberdelincuencia ataca a mi madre, a tu hija, a nuestros amigos? Los próximos años serán terribles.He convivido con los acosadores y sus víctimas, y yo mismo me convertí en una."