jueves,18 agosto 2022
Espacio euroiberoamericano de diálogo sobre la innovación social, profesional y académica
InicioOpiniónBlogsMidiendo la incertidumbre empresarial con que iniciamos 2017
Riesgos de futuro

Midiendo la incertidumbre empresarial con que iniciamos 2017

Futurolandia
La incertidumbre en las decisiones económicas tiene diversos ángulos de observación. Uno de ellos es la desconfianza en la evolución en un futuro inmediato, deducida de las encuestas de opiniones empresariales como saldo entre los que apuestan por empeoramiento y mejora respecto a la situación actual. Veasé mi anterior post s/ huellas-de-incertidumbre. Ahora concretaré resultados para España en los diez años del periodo 2007-2016 y perspectivas al inicio de 2017.

Hemos partido de los datos  para nuestro país de la encuesta  Economic Sentiment que coordina la Comisión Europea con frecuencia mensual y expectativas a tres meses. Combina cinco encuestas a industria manufacturera (producción, pedidos y stocks), servicios, construcción, comercio al por menor y consumidores. El índice conjunto se establece por la CE ponderando resultados de saldo con pesos, respectivos, 40/30/5/5/30%.

Los resultados del saldo "mejora -empeoramiento" (cero sería el empate entre optimistas y pesimistas) se sitúan en un promedio de -13 para el conjunto de los diez años, con un máximo anual, negativo, superior a -30 en 2008 y datos ligeramente positivos  ( entre 2 y 5) para 2015 y 2016.

Trasformado el saldo en desconfianza empresarial, tomando el dato más negativo como 100 puntos (en marzo de 2009), el indicador tiene un mínimo (diciembre 2015) de 2 puntos y un promedio ligeramente superior a 50, que sube a 70 en el periodo más fuerte de la crisis (hasta 2012), para irse reduciendo en 2013-14 hasta un índice 10 y un promedio de 5 en 2015-16.

No es que los empresarios estén exultantes respecto a la marcha de sus negocios pero, después de ocho años de crisis, eran sensiblemente más optimistas, en una perspectiva histórica, sobre su futuro inmediato tanto en 2015 como en 2016.

Como un estado subjetivo de ánimo, para valorarlo en el contexto del momento (ya fuera de la profunda crisis sufrida) es conveniente realizar un ajuste, en que hemos tomado como referencia los últimos 24 meses. En este periodo, el máximo de incertidumbre (la menor confianza) se sitúa a finales de 2014 (nuevo índice=100), el mínimo se alcanza a finales de 2015 (un año con alto crecimiento económico) y el año 2016 termina en un nivel cercano a 35 puntos, en un entorno de normalidad aunque por debajo del promedio de 50 e incluso con tendencia, por el momento, a la baja.

Dado que las predicciones de crecimiento de la economía española para el nuevo año marcan una desaceleración cercana a un punto de porcentaje (del 3,2% de variación del PIB en promedio 2016 a casi un 2,2-2,4% en 2017), las expectativas son de un giro progresivo hacia posiciones de incertidumbre crecientes (aunque moderadas) de las empresas. La disponibilidad del indicador mes a mes nos permite hacer un seguimiento de la situación.

Pero la cuantificación de la incertidumbre puede mejorarse combinando esta mayor o menor desconfianza empresarial, con otros componentes como la incertidumbre financiera, macroeconómica o su proyección en los medios de comunicación. Lo veremos en próximos post.

Antonio Pulido http://www.twitter.com/@PsrA

De interés

Artículos Relacionados

Centro de preferencias de privacidad