jueves,18 agosto 2022
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Primer veto al gran negocio de la banca con administraciones

Podemos, a punto de conseguir que Andalucía no contrate con bancos que desahucian

Redacción
Podemos está a punto de conseguir que la Junta de Andalucía no contrate con bancos que desahucian a ciudadanos por dejar de pagar las hipotecas de sus viviendas. Sería la primera vez que la banca vería reducido su negocio con las administraciones públicas por el trato a su clientela, negocio que tiene algunos de sus principales impactos en la educación y la salud, aunque de momento no evaluados. El líder del PSOE declara prioridad a ambos servicios, pero EL PAÍS aconseja pactar también con PP.

"Desalojar al PP de Madrid es necesario para defender el patrimonio de todos, especialmente en la educación y la sanidad", declaraba el sábado por el PSOE Pedro Sánchez, aunque por la autonomía reconocida a Susana Díaz en los pactos para su investidura se refería a Madrid. Por si acaso, añadía que "los madrileños no van a dudar en propiciar este cambio, que será un cambio seguro", aun cuando la última encuesta de EL PAÍS sitúa a su partido como como segunda fuerza en la Comunidad de Madrid y tercera en el Ayuntamiento de la capital.

Las últimas informaciones del domingo apuntaba que, ante el acto parlamentario previsto para hoy lunes, el PSOE no tiene garantizada su investidura en Andalucía en el acto de investidura a iniciar este lunes a las 12, pues ni Podemos, ni Ciudadanos, ni el PP se abstendrán en la primera votación, aunque los dos primeros lo harían en la segunda (ya el jueves o viernes) en función de lo negociado.La propia presidenta en funciones aseguraba que nadie le dicta lo que dirá en su discurso, donde presentará "el paquete más potente de lucha contra la corrupción que se ha conocido en España, y que ha hecho nunca ningún Gobierno", porque el PSOE-A "puede hacerlo ya que está lleno de gente honesta".Tendrá así  que esperar a la segunda votación, donde Podemos y Ciudadanos se abstendrían si el PSOE acepta las propuestas de Ciudadanos en economía y empleo, y las de Podemos sobre desahucios y reducción de altos cargos. Los socialistas andaluce confían en que Susana Díaz sea investida en segunda ronda, descartando totalmente la posibilidad de repetir los comicios.

Tanto Ciudadanos como Podemos han pedido acuerdos por escrito para abstenerse en segunda vuelta y facilitar la investidura, aunque el PSOE se ha resistido, insistiendo respecto a lo de los deshaucios que ya existen mecanismos legales para conseguir lo que pide en la acción diaria. 

De facilitar pese a todo la investidura, Podemos intentaría así superar su pérdida de apoyos en las encuestas de las últimas semanas, ante lo que el partido de Pablo Iglesias ha reaccionado dando prioridad a los desahucios y la reestructuración y quita de la deuda privada de las familias y los pequeños empresarios, con lo que compensaría el muy probable abandono de estas posiciones para la deuda pública para buscar votos entre el 40% de indecisos y remontar en las encuestas. 

Editoriales favorables a acuerdos con el PP

EL PAÍS resalta que, si el PSOE consigue atraerse a Ciudadanos y Podemos, el PP evidenciaría su aislamiento en el Parlamento andaluz, puesto que los populares se han excluido de la ronda de negociaciones para la investidura, y en dos editoriales consecutivos (el domingo y este lunes) el diario de PRISA pide no descartar al menos pactos postelectorales con el PP. LA RAZÓN considera, por su parte, que Pablo Iglesias teme que apoyar a Susana Díaz provoque un cisma en el seno del partido, máxime tras la marcha de Juan Carlos Monedero. Según el diario, se estaría repitiendo el mismo conflicto interno que se creó durante la campaña electoral entre Teresa Rodríguez y la cúpula del partido.

En este contexto en que Podemos está a punto de conseguir que la Junta de Andalucía no contrate con bancos que desahucian a ciudadanos por dejar de pagar las hipotecas de sus viviendas, EL PAÍS defendió los pactos postelectorales con el PP en sendos editoriales publicados consecutivamente el domingo y este lunes.

Su editorial del domingo lo planteaba en estos términos: "La dirección del PSOE ha decidido dejar libertad a sus candidatos a las elecciones municipales y autonómicas del próximo 24-M para pactar con quien necesite, con dos excepciones: prohíbe acuerdos con Bildu y descarta acuerdos con el PP. Sin embargo, en un momento en el que el diálogo y el consenso son prioritarios para la gobernabilidad, no es indicado marcar unas líneas rojas tan tajantes como ha hecho el PSOE. ¿Por qué renunciar a priori a posibles acuerdos que faciliten el gobierno solo por considerar adversario a un partido concreto? En el juego democrático todos los partidos son adversarios, pero también pueden ser aliados en busca de una estabilidad cada vez más necesaria en nuestro país. En estos nuevos tiempos los líderes políticos deberían plantear su estrategia electoral y poselectoral con apertura de miras y visión de Estado".

El editorial de EL PAIS este lunes añade que Ciudadanos hace lo adecuado en Andalucía y el PP debería sumarse a la cultura de pactos: "En los próximos días, Ciudadanos tendrá la primera oportunidad de hacer un gesto favorable para que en Andalucía gobierne la fuerza más votada, si se abstiene en la segunda votación de investidura de Díaz. El partido centrista va en la buena dirección por el plus de responsabilidad que puede aportar una formación moderada y reformista. La crítica del PP a Ciudadanos es una táctica cortoplacista, e ignora que tras el 24-M los populares necesitarán el apoyo de otros. Ciudadanos corre riesgos, puesto que permitir el gobierno de un competidor necesita coraje por parte de quien da el paso. Ese coraje es, precisamente, el que se necesita en la política española. El partido liderado por Albert Rivera tiene adversarios en el escenario tradicional que intentan perversamente presentar el apoyo a una investidura como una coalición vergonzante".

Por su parte, EL MUNDO destacaba el domingo en portada que el acuerdo alcanzado en Andalucía ha generado una ola de malestar en las bases de Ciudadanos que Albert Rivera y la cúpula del partido tratan de sofocar. Dirigentes de Ciudadanos están explicando a sus bases que el acercamiento al PSOE en Andalucía no supondrá en ningún caso entrar en el Gobierno de Susana Díaz y que solo persigue hacer cumplir, desde la oposición, su programa electoral.

Los diputados de Ciudadanos están abiertos a permitir la investidura de la candidata del PSOE absteniéndose en la segunda votación. Para conseguirlo, los socialistas se comprometieron el sábado a suscribir el pacto anticorrupción que propone Ciudadanos, cuya firma se escenificará públicamente la próxima semana. Únicamente quedan pendientes de negociación los temas que la formación liderada por Albert Rivera propone en materia económica.El vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, admitió que un virtual apoyo a Susana Díaz puede perjudicar a los intereses electorales de su partido a nivel nacional, pero añadió que no toman decisiones con criterios partidistas, sino en defensa del interés general. "Lo más cómodo sería no movernos o incluso que hubiera nuevas elecciones en Andalucía, porque el único partido que sube en estos momentos es Ciudadanos", señaló para explicar que su partido no actúa en función de "intereses particulares".

En cuanto a las conversaciones entre los socialistas andaluces y Podemos, el secretario de Organización del PSOE-A, Juan Cornejo, aseguró que su partido está "a un folio del acuerdo". Pese a que los representantes de Podemos rebajaron el sábado sus exigencias para el pacto, siguen reclamando dos temas fundamentales: que la Junta no trabaje con los bancos que desahucian a ciudadanos por incumplimiento hipotecarios y que se reduzca el número de altos cargos en la administración autonómica.

Declaraciones de PSOE y PP

Mientras el responsable socialista de la negociación, Juan Cornejo, llamaba "trilero irresponsable" al presidente del Gobierno por negarse a dialogar para impedir la investidura de Díaz, Mariano Rajoy decía,estar convencido de que el PP va a ganar las elecciones del 24 de mayo, por muchas razones, pero sobre todo "porque es el único partido que garantiza el empleo, el único partido de la moderación en España, no hay otro. Somos un partido que no es esclavo de las modas, ni que suplanta ni regatea con los valores ni los implanta en función de las circunstancias".

El jefe del Ejecutivo añadió que el PP es un partido que "cree en la democracia, en la libertad, en el espíritu de la transición. Estamos donde siempre hemos estado y preservando siempre nuestra independencia. Solo recibimos órdenes del conjunto de los españoles". Por todo ello, aseguró que el PP "tiene la conciencia de la tarea hecha ante los españoles", y lo que hay que hacer es "evitar pesadillas del pasado". "Tengo la absoluta certeza de que los españoles no caerán en el error de dar su confianza a las gastadas recetas del déficit y del paro, que estuvieron a punto de llevar al país a la ruina", subrayó el dirigente popular, que concluyó su intervención elogiando la labor de María Dolores de Cospedal, tanto al frente del PP como de la Comunidad castellano-manchega.

Por su parte, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, dijo que el PSOE "está en disposición de ser el primero, porque estoy convencido de que los madrileños quieren un cambio". "Desalojar al PP de Madrid es necesario para defender el patrimonio de todos, especialmente en la educación y la sanidad. Los madrileños no van a dudar en propiciar este cambio, que será un cambio seguro, y lo liderarán los socialistas, que lo que quieren son gobiernos para la mayoría. Eso es lo que nos jugamos el 24 de mayo, defender lo que es de todos", añadió.

El PP confía en mantener su poder territorial hasta las generales

Según LA RAZÓN, citando fuentes del PP, desde la dirección del partido se sigue trabajando con la hipótesis de que las elecciones generales van a condicionar la política de pactos de Ciudadanos y de Podemos tras las autonómicas y municipales. En el PP se piensa que ninguna de estas dos fuerzas querrá señalarse antes de la última cita electoral de este año, por lo que el partido que obtenga los mejores resultados electorales, aún sin alcanzar mayorías claras, podría gobernar, sobre todo en los municipios, ya que cada comunidad tiene sus propias reglas para elegir presidente. Según las proyecciones electorales de NC Report para LA RAZÓN, de marzo de 2015, el PP sigue obteniendo la victoria en diez de las trece comunidades donde se celebran elecciones, sin contar Ceuta y Melilla. Ocurre así en las plazas más emblemáticas como Madrid, Valencia, Castilla y León o Castilla-La Mancha.

Entre tanto, según el sondeo electoral elaborado por Feedback para LA VANGUARDIA, CiU y ERC quedarían hoy lejos de su actual mayoría en el Parlamento de Cataluña. Además, Ciudadanos sería la formación política que más crece, llegando a rozar la segunda posición en el mapa electoral. En concreto, CIU perdería hasta 15 diputados de los 50 que obtuvo en los comicios del 2012, con un voto estimado del 22,6%, y entre 25-26 diputados. ERC sería la segunda fuerza política, con el 16,6% de los votos y 26-27 diputados, seguida de Ciudadanos, que con el 19,1% de los votos sube de 9 a 26 diputados. El PSC alcanza el 9,9% de los votos, y mantendría 12-13 diputados de los 20 actuales. El PP cede más de la mitad de sus escaños, de 19 a 9, con el 6,6% de los votos. También en claro retroceso, ICV pierde 5 de sus 13 diputados, con el 6,6% de los votos. Podemos, que en el anterior sondeo conseguí 14 diputados, obtendría hoy 6-8 escaños (6,3% de votos). La CUP, finalmente, con el 7,11% de los votos, pasaría de 3 a 11 diputados.

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