jueves,18 agosto 2022
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Fernando Martínez. Fundación Universidad-Empresa

´Ser emprendedor tiene que dejar de ser una opción para ser una oportunidad´

ibercampus.es/C.B.
Con más de 30 años de experiencia a sus espaldas, la Fundación Universidad Empresa, no ha cesado en su labor de acercar el mundo laboral a los jóvenes universitarios e investigadores. Fernando Martínez, director de esta institución que gestiona cada año más de 4.000 becas, comenta para IBERCAMPUS.ES cuáles son los principales perfiles y destrezas más demandadas por las empresas.

P.- ¿Cuál es el perfil de los estudiantes que más demandan las empresas?

R.- Aparte de las ingenierías técnicas, que nos los quitan de las manos, lo que más se demanda es Administración y Dirección de Empresas, Económicas, Derecho, etc,. Porque son carreras con un común denominador muy amplio, con una gran versatilidad. 

P.- ¿Qué características, destrezas o habilidades son las más demandadas por las empresas a la hora de contratar a un becario?

R.- Hoy en día, las destrezas son algo fundamental y, o la gente lo asume, o va a tener una seria dificultad. Yo como empleador de esta institución incorporo a gente que ha hecho prácticas durante su etapa universitaria, o que tenga conocimientos de idiomas, que haya estado fuera formándose. En el currículum las notas son muy importantes, pero hay que mentalizarse de que no es lo único importante. Hay que formarse en esas competencias movilidad geográfica.

¿Tiene que ofrecer la universidad ambas cosas, formación y el aprendizaje de estas habilidades? Pues lo importante es que los estudiantes sepan que la formación que se les da en la universidad es necesaria pero no suficiente para la empleabilidad en una empresa. Ahora bien, si una universidad privada o pública decide apostar por las competencias y habilidades para complementar la pura formación académica, yo aplaudiré.

P.- ¿Qué aporta la realización de prácticas a un joven universitario?

R.- Conocer la empresa por dentro, que no es poco. Conocerla no sólo haciendo fotocopias que es lo que la gente siempre imagina que hace el becario. Le proporciona una visión real de lo que pasa en una empresa. Además, nadie duda de a formación universitaria, pero en la mayoría de los casos faltan competencias, habilidades, trabajo en equipo, responsabilidad…Y, hoy día, nos guste o no nos guste, al margen de la titulación que estés cursando, los conocimientos informáticos son imprescindibles, el manejo de un idioma es condición sine qua non para poder trabajar, etc.

P.- ¿De que manera contribuye la Fundación a mejorar la formación y empleabilidad de los universitarios?

R.- Damos oportunidad a los estudiantes y recién licenciados de todas las universidades, no sólo de Madrid. Y es que tenemos dos programas de becas, Citius y Optimus a las que pueden acceder estudiantes de toda España e incluso de Europa e Iberoamérica, siempre que sus títulos sean homologables. Estas becas suponen una oportunidad para los estudiantes de trabajar en las más de 400 empresas con las que tenemos convenio con un programa de 12 meses, con una tutoría y un programa de formación que consta de título propio y con un nivel de inserción de más del 85 por ciento cuando terminan la beca.

Nosotros apostamos por la beca rigurosa, la beca en la que hay un tutor por parte de la empresa y otro por la parte académica, apostamos siempre por unas becas remunerada, por un programa de formación completo. En nuestra página web tenemos una ventana que es quieroserbecario.com. El nombre no es casual, justamente cuando la palabra becario está tan denostada. Nosotros apostamos por ella porque forma parte de la formación.

P.- Los ‘ranking’ más prestigiosos colocan a la universidad española en puestos a años luz de las mejores universidades del mundo, ¿cuáles son las principales carencias de nuestro sistema educativo superior?

R.- Precisamente, es por esa razón, porque en países del norte de Europa y ya no digamos en Estados Unidos, abrazan a las empresas, están al lado de ellas. No se concibe un desarrollo empresarial o industrial sin universidades que apuesten por investigación. La mayor parte de los directivos de esas empresas, forman parte, además del cuadro directivo de esas empresas. Ahí llevamos mucho retraso. Cualquier rector de una universidad española, ya sea pública o privada tiene que tener claro que el futuro va por ahí, por contemplar el aspecto de la empleabilidad.

P.- ¿Por qué hay todavía tan pocos emprendedores en nuestro país?

R.- Yo creo que es un problema de cultura, de que desde pequeños en casa y en el colegio no se habla de ello. Hay mucha gente que quiere se funcionario y yo lo respeto y reconozco el valor social de este sector, pero hay más cosas. En este sentido, la Fundación está haciendo todo lo que está en sus manos: vamos a las universidades y explicamos a los estudiantes que el ser emprendedor tiene que dejar de ser una opción para ser una oportunidad. Pero tenemos mucho por hacer. Nunca ha habido tantas oportunidades como hoy, tanto a nivel estatal como municipal o autonómico. También hay instituciones que te ayudan a crear tus empresas u otras, como la nuestra, que ofrece una pre-incubadora para orientar y asesorar a la persona que llega con una idea pero que no sabe hacia donde conducirla.

P.- Muchas voces del mundo de la empresa denuncian que el proceso de Bolonia se está haciendo sin tenerlas en cuenta…

R.-Es que es verdad. Es que el mundo académico es un mundo cerrado que quizá debería tener más en cuenta la empleabilidad, por eso digo, que se resuelva lo que se resuelva va haber que seguir haciendo más cosas. Ahí instituciones como la nuestra con una gran experiencia tendremos que jugar un papel muy importante.

Yo sigo diciendo que la práctica siempre va ase importante sea cual sea el final de todo este proceso. Tengo la impresión de que se decida lo que se decida siempre va a haber que hacer algo más.

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