La abogada de las afectadas Amparo Díaz lamenta que "toda su camarilla siga en la Universidad". No fueron condenados pero el fallo sí explicaba que había un grupo consentidor. El catedrático, suspendido inmediatamente de funciones y del pago de la jubilación, tiene recurrida la sentencia porque considera que las acusaciones "no merecen en absoluto la más mínima fiabilidad".
El decano de Ciencias de la Educación de la Universidad de Sevilla (US) entre 1997 y 2009, Santiago Romero, había sido condenado por los abusos sexuales cometidos sobre ellas. Había forzado su silencio amenazando sus carreras pero la sentencia, que está recurrida por el catedrático, supuso algo de luz a años y años de temores.
La soledad de las víctimas durante el juicio (solo dos de las 42 personas que formaban el departamento les mostraron su apoyo, según lamentaron en esta entrevista) y su futuro claramente diezmado se vieron algo paliados por aquel fallo judicial de hace ahora un año que, también, sirvió para sensibilizar al conjunto de la sociedad de que se pueden tolerar comportamientos abusivos en el seno de la Universidad. Pero la Universidad, más allá de suspender provisionalmente de funciones al condenado a raíz de la sentencia, no ha hecho mucho más al respecto, al menos en ese caso concreto.
No ha habido desde entonces ni investigación interna ni sanciones administrativas ni petición expresa de disculpas de esos "miembros del personal docente y PAS de la Facultad" a los que aludía la sentencia como consentidores en cierto modo de las situaciones condenadas. Tanto la abogada Amparo Díaz, que representa a una de las víctimas, que sigue en tratamiento psicológico, como el delegado en prevención de riesgos laborales de la US, Jesús Castillo, se han mostrado a eldiario.es Andalucía muy críticos con la inacción de la Hispalense respecto a la "camarilla" o "red de acoso" que, por acción o por omisión, a su juicio, permitieron que la situación de abuso se alargara durante años sobre las profesoras hasta que la condena se hizo púbica a través de los medios de comunicación.
Una vez que la US recibió hace un año en la sentencia del Juzgado de lo Penal número 2 y tras estudiarla, en la misma mañana informó que “ha decidido reabrir el procedimiento sancionador contra el citado catedrático paralizado como consecuencia de la instrucción del procedimiento penal”. Recordardaba que fue la propia institución universitaria la que inició dicho procedimiento. La apertura del procedimiento sancionador se acompaña con la suspensión cautelar de toda actividad universitaria al profesor Santiago Romero, al tiempo que se le prohíbe acceder al Centro.