Por ejemplo, tradicionalmente en Turquía se dice "Alá yardim etsin" (que Alá te ayude) para desear suerte, pero ahora los jóvenes utilizan la expresión inglesa "Good luck!" traducida literalmente, explicó.
El especialista señaló asimismo que el inglés se ha convertido en una lengua universal y como tal está influyendo sobre el resto de idiomas del planeta, incluidos los de los países musulmanes. "Incluso cuando la lengua materna de un musulmán no sea tradicionalmente islámica, como el español, inglés o alemán, éste utilizará probablemente algunas expresiones árabes como ´ajlak´ (´ética´) o ´fitra´ (´naturaleza humana´), que tienen unas acepciones particulares en el Islam", aseveró.
A su juicio, la extensión del inglés y el uso de las nuevas tecnologías de la información e Internet está cambiando las estructuras lingüísticas y, por tanto, también están afectando a las mentalidades, más influenciadas por las modas occidentales.
Sin embargo, apuntó, este fenómeno también está provocando una reacción en contra en países como Turquía e Irán y en la región de Oriente Medio, donde la sociedad, incluidos los jóvenes, se está "islamizando" cada vez más.
Caksu participó ayer en la conferencia "El papel de los países islámicos en un mundo globalizado" que se celebra esta semana en la capital de Malasia.