Así lo ha expresado el ministro durante la Sesión de Control al Gobierno en el Pleno del Congreso, después de que se diera a conocer hace casi dos semanas el documento elaborado por estos expertos, en el que se propone, entre otros aspectos, una mejora del sistema de becas, dar más fondos a los centros con mejores resultados en investigación, abre la puerta la contratación de rectores y profesores extranjeros, en detrimento de los funcionarios, fórmulas para evitar la endogamia, o propone que las comunidades autónomas participen en los órganos de gobierno de los centros universitarios.
Si bien el ministro no ha valorado ninguna propuesta concreta de este documento, ha reconocido que la universidad española ha avanzado mucho desde 1975, cuando había 200.000 matriculados, hasta la actualidad, con más de 1,5 millones. No obstante, ha advertido de que "todavía hay muchos aspectos en los que mejorar", entre los que se encuentra una "mayor internacionalización, excelencia y competitividad".
"A partir de estos trabajos concienzudos, estaremos en condiciones de presentar a la comunidad educativa universitaria y a la sociedad elementos que permitirán que la universidad continúe en su progreso", ha apostillado