Se debatieron en la jornada cuestiones, relativas al
cambio climático para Iberoamérica, políticas públicas y alianzas que se requieren para afrontar sus efectos, y
cómo afecta al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 (ODS 2030). En el diálogo, participaron muchos/as expertos/as, destacadas personalidades del sector público, la sociedad civil y asociaciones medioambientales. También fue presentado el “
Informe de Cambio Climático y Desarrollo Sostenible en Iberoamérica 2018”.
La ministra española para la Transición Ecológica,
Teresa Ribera, destacó la importante relación entre la
acción ambiental y el desarrollo sostenible, algo que tiene implicaciones profundas en los modelos de consumo y de desarrollo, que deben ser repensados. La titular señaló que el futuro se gana cuando se piensa en él.
La secretaria de SEGIB,
Rebeca Grynspan, y la ministra española reflexionaron sobre los retos del desarrollo sostenible y el cambio climático en Iberoamérica. Ambas coincidieron de que la importancia de “pensar globalmente, pero actuar localmente” para contrarrestar sus efectos, algo que lleva a una
actuación en distintos niveles, como público, privado, sociedad civil, tercer sector, y tomando en cuenta la
importancia de concienciar a las nuevas generaciones.
Asimismo, Grynspan enumeró
4 ejes de acción prioritaria de los iberoamericanos para la lucha contra el cambio climático:
generar apoyos políticos;
producir conocimiento en materia de cambio climático
con recomendaciones para los tomadores de decisión; realizar propuestas y convertirlas en modelos de
cooperación; y apoyar las
soluciones que genera la ciudadanía para enfrentar el fenómeno.
El informe destaca la
inversión en energías renovables como un paso urgente para mitigar el cambio climático en la región, algo que puede representar una oportunidad, ya que
11 países iberoamericanos se encuentran entre los países en vías de desarrollo más
atractivos para este tipo de inversiones, que además puede representar un importante motor de generación de empleo.
La co-autora del informe, Rosa Castizo, presentó las principales conclusiones y recomendaciones del documento, destacando
la vulnerabilidad de la región al cambio climático, con especial énfasis en la niñez, los ancianos y los agricultores, que son los grupos de población más expuestos a sus efectos. De igual forma, destacó que
la pobreza, la desigualdad y la rápida urbanización son factores que agudizan esta vulnerabilidad.
La jornada
concluyó con el diálogo abierto sobre “
Alianzas para el Desarrollo Sostenible en Iberoamérica”, con la participación del director general del Alto Comisionado para la Agenda 2030 en España, Federico Buyolo García, la ex canciller de Argetina, Susana Malcorra, la presidenta de la Red Española para el Desarrollo Sostenible, Leire Pajín, la responsable de Gestión de Sostenibilidad del Grupo Iberdrola, Mónica Oviedo y la directora de la Oficina Española del Cambio Climático, Valvanera Ulargui.