Los autores de este descubrimiento son Wolfgang Gieren y Grzegorz Pietrzynski, del Grupo de Astronomía del Departamento de Física de la Universidad de Concepción, los cuales a través de un programa de búsqueda de nuevos planetas lograron identificar este astro. Según Wolfgang Gieren, las principales características que tendría es que “su masa es muy similar a
La enana roja, clasificada como G1 581, que alberga al nuevo planeta, está situada a sólo 20,5 años luz de nuestro sistema solar, en la constelación del Libra, y posee un tercio de la masa del Sol.
HARPS
Al igual que ocurriera con el hallazgo de “Súper Tierra”, este descubrimiento se hizo gracias al Buscador de Planetas con Velocidad Radial de Alta Precisión (HARPS), el espectrógrafo más preciso y eficiente que existe para medir las velocidades radiales de estrellas. Ubicado en el telescopio ESO de
Fue gracias a este instrumento que los astrónomos pudieron detectar las minúsculas variaciones periódicas de la velocidad radial de HD 219828, inducidas por la presencia de su planeta, en los espectros de la estrella tomadas durante 22 noches en 2006, y determinar la masa del planeta y sus características orbitales.
FONDAP
El estudio de planetas extrasolares ha llegado a ser un fascinante tópico de investigación en astronomía desde el primer descubrimiento de un planeta fuera de nuestro sistema solar en 1995, por el astrónomo suizo Michel Mayor.
Según Geiner “Los más de 200 planetas extrasolares conocidos en este momento demuestran una fascinante variedad en sus características orbitales y físicas que ayudarán a entender como se están formando sistemas planetarios, en función de las propiedades de sus estrellas centrales, y darán claves de entender mejor la formación y evolución posterior de nuestro propio sistema solar”, asevera.