Sin embargo, se ha visto obligada a revisar sus requisitos de admisión porque la enseñanza de idiomas extranjeros en las escuelas públicas es tan deficiente que exigir un certificado equivale a discriminar a los alumnos que salen de esos centros.
Actualmente, menos de un 50 por ciento de los alumnos de la enseñanza pública elige algún idioma extranjero frente a un 80 por ciento hace sólo ocho años.
Aunque un certificado de enseñanza secundaria en un idioma extranjero es requerido todavía en muchos colegios privados, sólo un 17 por ciento de las escuelas públicas exigen a los alumnos seguir estudiando otro idioma distinto del inglés después de los catorce años.
Durante varios años, Oxford y Cambridge han sido acusadas de favorecer a los estudiantes procedentes de la enseñanza privada.
Oxford renunció a comienzos de los noventa a exigir un idioma extranjero, pero otra prestigiosa universidad, University College London, decidió seguir el camino opuesto en el 2006 y dijo que a partir del 2012 todos los que aspirasen a estudiar en ella tendrían que tener un certificado que acreditase su conocimiento de otro idioma.
Sin embargo, desde entonces ha descafeinado su plan y anunciado que admitirá a los estudiantes que no cumplan ese requisito siempre y cuando se comprometan a dedicar algún tiempo al estudio de un idioma en ese centro una vez matriculados.
Fuente: EFE