Con esta tecnología, que permite el transporte de energía con menos pérdidas por resistencia eléctrica, se puede transportar mucha más corriente eléctrica que con los sistemas convencionales, por lo que es una alternativa viable para solucionar los problemas de los picos de demanda de electricidad. Además, la tecnología reduce las emisiones de CO2 por generación de electricidad e incrementa la seguridad de las instalaciones de la red de distribución. El proyecto nos uno al reducizo conjunto de países pioneros que están introduciendo esta tecnología a escala mundial.
Los doctores Xavier Obradors, investigador del Instituto de Ciencia de Materiales de Barcelona y coordinador del proyecto, y el doctor Àlvar Sánchez, profesor del Departamento de Física de la uAB, presentar el proyecto en rueda de prensa.