jueves,18 agosto 2022
Espacio euroiberoamericano de diálogo sobre la innovación social, profesional y académica
InicioEmpresaAcnurCómo acoger un refugiado en casa
ABC apunta cómo acoger un refugiado en casa

Cómo acoger un refugiado en casa

Redacción
Donaciones, Red de ciudades-refugio y hasta alojamiento en casas familiares son algunas de las opciones que se plantean en la prensa ante la crisis de los refugiados, que la prensa española coincide en considerar el mayor y más urgente reto de la Unión Europea, al tiempo que resalta como modelo y ejemplo a seguir el de Alemania . El diario ABC apunta cómo acoger un refugiado en casa.

Mientras los países de la Unión Europa debaten sobre el reasentamiento de 120.000 refugiados en lugar de los 40.000 inicialmente previstos, la gente se ha puesto manos a la obra con diferentes iniciativas, según el diario ABC que apunta las siguientes claves para los interesados:

 

Los datos del año pasado y de los primeros meses de 2015 permiten tener una noción del impresionante aumento de la presión migratoria. En 2014, según la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), un total de 5.947 personas pidieron protección internacional en España (término que engloba tanto el estatuto de refugiado como la protección subsidiaria, es decir, se les protege contra la devolución, se revisa su situación cada cierto tiempo pero no pueden pedir nacionalidad española después de cinco años de residencia legal como en el caso de los refugiados). A nivel europeo pidieron el pasado año protección 626.065 personas.

El número se personas que pidió protección en 2014 en nuestro país ya se alcanzó en 2015. «Desde el 1 de enero al 30 de junio ha habido las mismas solicitudes, es decir, en torno a 6000 personas, incluyendo sirios, ucranianos, palestinos, nigerianos, etc.», explican fuentes de laAgencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR). De esta cifra total, el número de sirios que pidió asilo entre enero y junio ha sido de 3.124, es decir, más de la mitad del total. Melilla es la primera ciudad receptora de solicitantes de asilo, por encima de Madrid y primera puerta de entrada a España para refugiados, explican desde ACNUR.

Pero conforme aumenta la necesidad de ayuda, también lo hace la voluntad de ofrecerla. Una las iniciativas que más acogida han tenido en nuestro país ha sido la creación de una Red de Ciudades-Refugio, propuesta por la alcadesa de Barcelona, Ada Colau y a la que se sumó su homóloga en Madrid, Manuela Carmena, y que se extendió a varios municipios (Segovia, Almería o Santa Cruz de Tenerife, por poner algunos ejemplos) y también a grandes ciudades y autonomías (Córdoba, Valencia, Navarra, Extremadura, Galicia o Castilla y León). En algunos casos, se ha llegado a concretar incluso la capacidad de personas que podrían recibir.

«Nos parece postivo que la sociedad reacciones y que los ayuntamientos ofrezcan apoyo. Hay muchas personas que están a la espera de ser acogidos en centros porque el número de plazas totales, (986 según datos del Ministerio de Empleo), ya se ha saturado por lo que se necesitan más recursos y más centros. Hay que tener en cuenta además que España solo acoge al 1 por ciento de los refugiados que llegan de manera espontánea. Si se recibieron 5.947 en 2014, Alemania, por ejemplo, recibió 202.645», explican desde ACNUR.

Fuentes del Ministerio de Empleo y Seguridad Social (encargado de la acogida e integracíon), señalan, sin embargo que «ningún refugiado se ha quedado sin ayuda y que no se pronunciarán acerca de las cuotas (al margen de las 6000 personas que ya están en España) hasta que no se concluya el reparto que establecerá Bruselas».

¿Puedo acoger un refugiado en mi casa?

Los obispos españoles, por su parte, también han ofrecido sus centros de acogida y comunidades para acoger a refugiados. Además, el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ha adelantado, en una entrevista con Europa Press, que enviará en los próximos días una carta a las comunidades cristianas para que acojan a refugiados tanto en parroquias como en familias cristianas.

También ha habido muchos ciudadanos de a pie que se han ofrecido a recibir refugiados en sus casas. «No sabemos cómo va a gestionarse esa iniciativa, pero es importante que haya coordinación con el organismo de Gobierno encargado de la acogida e integración de los solicitantes de asilo y de los refugiados. No hay nada establecido hasta el momento y es el Gobierno el que tiene que pronunciarse al respecto. Si llegara a producirse, hay que tener en cuenta qué persona tiene más necesidad, cuáles son las necesidades de las familia de acogida…Ellos pasan unos seis meses de estancia en centros pero no tienen recursos y luego tienen que derivarlos, salen de los programas y no tienen dónde ir. Los refugiados necesitan además una referencia, gente que los ayude a nivel afectivo incluso», señalan desde ACNUR.

Programa de acogida e integración

Según datos del Ministerio de Empleo, el programa de acogida en España está estructurado en tres fases (acogida, integración y autonomía). La fase de acogida se desarrolla en Centros de acogida a Refugiados o bien a través de los Centros o plazas gestionadas por ONGs. Las personas beneficiarias pueden tener acceso a ayudas económicas

Cada una de las fases tiene una duración de seis meses, que puede ser prorrogables (hasta un máximo de 24 meses) en función de la vulnerabilidad de cada persona. Durante la primera fase se les da alojamiento, manutención, atención jurídica, psicológica, ayuda económica, etc. Estas se mantienen en las dos siguientes fases.

«Posteriormente, el hecho de acoger a una persona es un asunto privado de cada uno, que por supuesto no está prohibido pero es mejor gestionar desde ONGs. En cualquier caso, estas personas tienen derechos en materia de educación, sanidad, es decir, no son inmigrantes irregulares», señalan desde el Ministerio de Empleo.

En cualquier caso, la secretaria general de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Estrella Galán advierte de que «la lógica humanitaria del sufrimiento y la emoción no debe sustituir a la lógica de la justicia y los derechos. El hecho de que la gente de un paso adelante debería avergonzar a los Estados que están pasivos ante la situación. Pero hay que tener en cuenta que los refugiados tienen derechos y que en España hay una red de acogida con enorme experiencia, gestionada por profesionales. Muchos refugiadosnecesitan atención psicológica, han sufrido violencia extrema y la buena voluntad está bien, pero hay que actuar con profesionalidad y sobre todo, darles autonomía y no estar a expensas de que alguien les quiera dar de comer o no, es un derecho el poder pedir asilo».

El uso de casas de particulares ya ha sido una iniciativa que ha prosperado en Islandia, donde la escritora y profesora Bryndis Bjorgvinsdottir, creó un grupo de Facebook: «Siria está llamando» para reclamar a la ministra de Asuntos Sociales, Eygló Hardardóttir, que permita acoger a los recién llegados. Son más de 14.000 ciudadanos los que han apoyado la idea.

Organizaciones de ayuda

Pero otra forma de colaborar, una de las más habituales, es con donaciones. Se puede realizar a través de ACNUR, haciendo aportaciones regulares o un donativo puntual. También se puede donar en CEAR, donde también se puede hacer una aportación como donante (puntual) o como socio (habitual).

CEAR también tiene otra iniciativa, #UErfanos a través de la que están recogiendo firmas para que, entre otras cosas, se desarrolle una nueva política de asilo y migración europea en la que se priorice a las personas y los derechos humanos, se ponga en marcha una operación de rescate y salvamento eficaz que cuente con los medios y el alcance necesarios, cumpliendo con el deber de socorro, con el fin de evitar más muertes en el Mediterráneo.

También hay otras instituciones cuyos recursos se destinan a colectivos o necesidades puntuales como el caso de UNICEF, para ayudar a los niños sirios, Acción contra el Hambre que pide donativos para llevar agua potable a Siria «que tenía como Europa antes del conflicto» o a través de Intermón Oxfam.

De interés

Artículos Relacionados

Centro de preferencias de privacidad