jueves,18 agosto 2022
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No apartar a la tecnología

Desconectar de golpe en vacaciones provoca más estrés y ansiedad

Redacción
"Parar la actividad en seco por vacaciones puede provocar más estrés y ansiedad. Por lo tanto, hay que reducir el ritmo paulatinamente". Así lo recomienda el psicólogo Manuel Armayones, director del master universitario de Psicología 2.0 y mHealth (psicología, salud y calidad de vida) de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).

En un artículo publicado por la UOC, Armayones explica que “desconectar de la presión, las prisas, la conexión continua y las reuniones interminables es lo que nos permite descansar, pero debemos hacerlo después de un trabajo previo de ir bajando gradualmente el ritmo”.

Según este experto, cuando una persona cae enferma nada más comenzar sus vacaciones, esto se debe a “la situación de tensión laboral de los días previos, etapa en la que no se presta atención a las señales de agotamiento que nos envía el cuerpo”.

¿Cómo se puede bajar el ritmo paulatinamente?

Manuel Armayones facilita algunas pautas para conseguir reducir el ritmo profesional de manera gradual. Así, aconseja dedicar un rato de los primeros días de vacaciones a comprobar que todo va quedando cerrando.

Además, Armayones propone que se informe a potenciales interesados de que se va a disfrutar de un tiempo dedicado a otras actividades, y que se programen los dispositivos para que informen también de esta circunstancia.

Así mismo, el profesor de la UOC sugiere que se propicien espacios y momentos para la creatividad “sin obligarnos» a no pensar en el trabajo, pero mirándolo desde otra perspectiva”.

Por otro lado, Armayones rechaza que, durante las vacaciones, se huya de toda expresión tecnológica. En este sentido, el experto afirma que “el uso de aplicaciones móviles que nos permitan comunicar cómo nos sentimos, qué nos ilusiona -un viaje, por ejemplo- o compartir fotos de nuestros hijos tendrá en nosotros un efecto positivo”.

En este contexto, los avisos de los dispositivos inteligentes de un mensaje entrante “se perciben mucho mejor que mientras trabajamos”, porque, cuando estamos bajo presión, puede interpretarse como “un nuevo encargo de trabajo, problemas con algún cliente o proveedor, etc.”.

Retorno a la libreta y al bolígrafo

Por último, Manuel Armayones propone “desconectar de algunas situaciones que durante el año laboral nos estorban y afectan”. Así, por ejemplo, “podemos aprovechar para trabajar sin conexión, quizás solo con una simple libreta y un bolígrafo, o leer un libro sobre un tema profesional que nos interesa por el placer de hacerlo”.

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