El Presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas, Ángel Gabilondo declara que la cuestión sobre la modificación del calendario escolar es un asunto de enorme importancia para la CRUE, y que merece un debate interno entre las universidades españolas en el seno de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) y, dada su importancia, en la sociedad española.
Gabilondo planteó, a título personal, en distintas entrevistas la pasada semana, la necesidad de homogeneizar el calendario universitario español con el resto de calendarios europeos. Esto significaría en la práctica el adelanto del curso universitario a primeros de septiembre y su finalización en mayo. Los exámenes extraordinarios podrían por lo tanto realizarse a finales de junio o comienzos de julio.
Estas declaraciones se enmarcan dentro de la voluntad progresiva de adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES). El Presidente de la CRUE quiere instar a hacer un debate público, pero no sin antes suscitar el debate dentro de la CRUE.
La Presidencia de la CRUE considera que la necesaria puesta en común entre las Universidades Españolas desembocará en un debate público sobre este tema que culminará en un consenso general, ya que el asunto afecta no sólo a la educación superior universitaria.
Tal y como informa ABC, algunos centros -fundamentalmente privados- han introducido ya novedades en lo que se refiere al comienzo y el final del curso y a los exámenes de septiembre. Unas extienden sus cambios a todo el calendario, otras se limitan a modificar las fechas de los exámenes, tanto extraordinarios como de finales de cuatrimestres. Las más avanzadas son
Además, la idea de Gabilondo ya ha sido secundada por los rectores de la Autónoma de Barcelona, Carlos III y Pompeu Fabra, que recientemente suscribieron un convenio de colaboración con la Autónoma de Madrid para ofrecer programas conjuntos. En el debate, será parte interesada y destacada los alumnos, a los que afecta en mayor medida el cambio. Entre las dificultades para su aplicación se plantea la necesidad de modificar las fechas de la selectividad y la complejidad organizativa que traerá consigo el nuevo modelo.