viernes,19 agosto 2022
Espacio euroiberoamericano de diálogo sobre la innovación social, profesional y académica
InicioSociedad, Política y SostenibilidadPolíticas y ODSEl envejecimiento del profesorado obliga a las universidades a modificar sus plantillas
Se acerca una avalancha de jubilaciones

El envejecimiento del profesorado obliga a las universidades a modificar sus plantillas

ibercampus.info
Todo parece indicar que se aproxima una importante era de cambios en la universidad. Por un lado, el nuevo EEES que tanta expectativa ha creado. Por otro, el simple paso del tiempo. Según cifras del Consejo de Coordinación Universitaria (CCU), gran parte del profesorado universitario español se acerca a su jubilación, lo cual traerá una avalancha de relevos en los próximos años.

La edad de jubilación obligatoria esta fijada en los 70 años, aunque se puede hacer desde los 65 si se desea. Por tanto, teniendo en cuenta que el 34,5% de los docentes tenia mas de 50 en el pasado curso, y el 9,6% ya era sexagenario, en los próximos 10 o 15 años uno de cada tres profesores podría jubilarse. Estos porcentajes se traducen en 41.529 posibles jubilaciones.

Una de las características de este envejecimiento del profesorado se da en que no afecta de igual modo a todas las universidades: las instituciones mas antiguas, como la Politécnica o la Complutense de Madrid, poseen las medidas de edad mas elevadas, con 50,2 y 49,2 años respectivamente, según publica El Mundo. Entre las mas jóvenes, se encuentran la Carlos III de Madrid, la Pablo de Olavide, la Rey Juan Carlos, la Universidad de Gerona y la de Jaén.

Pero la estructuración de la plantilla no es fácil, sobre todo teniendo en cuenta factores que hacen de esta cuestión un quebradero de cabeza. Mientras que por un lado, la introducción de nuevas tecnologías obligara a aumentar la ratio de profesores por alumno, el descenso de la natalidad que hubo en los 80 y 90 hace que el numero de universitarios sea menor.

Algunas de las medidas que las instituciones comienzan a plantearse son, por ejemplo, dar jubilaciones voluntarias con incentivos a profesores mayores de 60 años, como hizo la Universidad de Sevilla este curso. Lo cual les permitió ahorrar dinero para invertir en sueldos de abundantes y asociados.

La Universidad de Sevilla ofreció a principios de este curso 100 jubilaciones voluntarias incentivadas a los profesores de más de 60 años y 35 cotizados en docencia o a aquéllos con más de 65 años. A ellas se acogieron 45 docentes de entre 60 y 70 años. Ello supuso un ahorro de 1.750.000 euros en sueldos con los que se contrató a 25 ayudantes y 20 asociados.

Otras universidades, como la de Barcelona, la de Girona o la Rovira i Virgili han puesto en marcha políticas parecidas como el Plan de Emeritaje, iniciado por la Pompeu Fabra.

El tema de la jubilación fue uno de los puntos importantes en el programa electoral del reelegido a rector Carlos Berzosa, quien prometió compensar las jubilaciones subvencionadas con el fichaje de jóvenes cerebros.

La clave de esta practica radica en que prejubilar a un profesor veterano significa ahorra un sueldo que permite costear la jubilación incentivada además de la incorporación de un docente sustituto.

Sin embargo, la Politécnica de Madrid no se ha planteado intensificar esta practica por el momento: «Urgente no es, lo cual no implica que no exista interés en que la renovación del personal se vaya produciendo. Además, no creemos que eso vaya a aumentar nuestra calidad y nuestro prestigio», afirma en El Mundo Emilio Mínguez, vicerrector de Gestión Académica y Profesorado de esta institución. Pues su objetivo principal es atraer a los jóvenes.

Pues par algunas universidades, los veteranos no son un freno para el progreso educativo sino una seña de experiencia.

De interés

Artículos Relacionados

Centro de preferencias de privacidad