Durante su intervención en la Comisión Mixta (Congreso-Senado) No Permanente para el Cambio Climático, Garmendia afirmó que el proyecto perseguirá reforzar las capacidades en los ámbitos de investigación que cuentan con menos recursos, atendiendo entre otras necesidades al conocimiento científico que precisan las administraciones públicas españolas para diseñar políticas de mitigación y adaptación al cambio climático.
Igualmente, recordó que la responsabilidad de la instalación del Instituto está compartida por los Ministerios de Ciencia e Innovación y de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino y señaló que la previsión es «poder cerrar el proyecto científico en pocos meses» e instalar ese centro antes de junio.
No obstante, apuntó que en los Presupuestos Generales del Estado para 2009 de ninguno de estos dos ministerios aparece partida alguna para este Instituto porque «aún no se ha decidido qué figura jurídica se adoptará» y por ello, según Garmendia «no tiene sentido incluir una subvención nominativa». Sin embargo, dijo que por parte de su departamento se puede usar el fondo para ICTS para financiar su puesta en marcha, una vez esté claro el acuerdo institucional.
Papel crucial de la I+D+i para frenar el cambio climático
En cuanto al Cambio Climático, la ministra de Ciencia e Innovación afirmó que las políticas de I+D+i son «esenciales para elaborar propuestas» sobre ese «reto globalizado» y que sus instituciones «juegan un papel determinante».
Así, celebró que en España, en los últimos años se ha avanzado «de forma muy importante en la conexión entre la política científica y tecnológica y otras políticas sectoriales, como es el caso del cambio climático», pero insistió en el «papel crucial que tiene el conocimiento científico y la innovación tecnológica en ese desafío».
«España debe dotarse de capacidades si quiere ser un actor relevante en la esfera internacional», reconoció la ministra de Ciencia e Innovación, que además, señaló la necesidad de que la ciudadanía reclame a las instituciones de gobierno «soluciones».
Asimismo, Garmendia explicó que la Estrategia Española de Cambio Climático y Energía Limpia, aprobada en Consejo de Ministros el 2 de noviembre de 2007, es parte de una estrategia de desarrollo sostenible que busca fomentar la energía limpia como factor de lucha contra calentamiento global. Para ello, acotó que en el marco del nuevo Plan Nacional de I+D+i 2008-2011 el Gobierno ha dotado ese área con 170,9 millones de euros para 2008.
Por otra parte, la ministra destacó el papel de las universidades a través del programa CONSOLIDER que cuenta con 57 proyectos en marcha de los que 9, es decir el 16 por ciento, están relacionados con el Cambio Climático. En términos presupuestarios 38,63 de los más de 279 millones de euros movilizados corresponden a esos proyectos, el 13,8 por ciento.
También subrayó la importancia de programa CENIT, que financia consorcios público privados liderados por empresas para la generación de avances tecnológicos de carácter estratégico. Así, en las cuatro convocatorias emitidas desde 2006, 61 proyectos cuentan con un presupuesto de 1.610 millones de euros, a los que el Ministerio de Ciencia e Innovación contribuye con 752 millones de euros.
De estos, expuso que 14 están relacionados con el cambio climático con un presupuesto de 356,8 millones de euros y una subvención de 107,3 millones de euros y precisó que el 14,26 por ciento del presupuesto del Ministerio para este programa se destinan a proyectos relacionados con el cambio climático.
«España está llamada a jugar un papel destacado en análisis científico del fenómeno y en la búsqueda de soluciones tecnológicas. Y debe hacerlo tanto en el plano nacional como en el internacional, aprovechando al máximo las nuevas oportunidades derivadas de la construcción del Espacio Europeo de Investigación», concluyó.
