En esta primera entrevista como Director Académico del IUP, el catedrático resalta la necesidad de seguir mejorando y les dice a los estudiantes que, aunque en estos momentos se vivan atisbos de indefinición y de crisis de crecimiento del Espacio Europeo de Educación Superior, “la convergencia de todos los títulos y su reconocimiento es el camino que acabará siendo realidad”.
P.- Desde el mes de noviembre de 2007 ocupa el cargo de Director Académico del Instituto Universitario de Posgrado (IUP). ¿Cuáles son sus objetivos, desde el puesto que ocupa, para el 2008?
R.- Los objetivos básicos para el 2008 son varios: por una parte, creo que es importante seguir trabajando en la mejora de la impartición para que se siga considerando al IUP como un centro pionero y de referencia en la enseñanza de posgrado no presencial. Por otra parte, creo que hay que avanzar decididamente en la conversión hacia Bolonia de nuestras enseñanzas.
En tercer lugar, hay que explorar nuevos campos del saber donde el IUP pueda ofrecer calidad y, al mismo tiempo, satisfacer las necesidades emergentes del mercado del conocimiento. Y en último lugar, creo que es muy importante seguir creciendo en nuestro modelo de enseñanza “in company”, es decir, seguir trabajando con las empresas que confían en nosotros para satisfacer sus necesidades de formación y, en el fondo, para acabar siendo un poco su “universidad corporativa”.
P.- Su especialidad se centra en la filología latina y es sobre esta materia, sobre la que ha desempeñado su actividad docente. ¿Cómo llegó a interesarse por la formación on-line?
R.- De hecho yo soy filólogo clásico, aunque mi campo de investigación es la antigüedad clásica, eso sí, normalmente partiendo de los textos. Mi interés real en la enseñanza on-line y mi especialización en ella empieza cuando asumo, en 2002, el cargo de Vicerrector de Doctorado y formación continua de la UAB. Al empezar a conocer a fondo el sector de la enseñanza “a lo largo de toda la vida”, me doy cuenta del potencial real de poder ofrecer formación de calidad a quien ve casi como una carga, por temas profesionales o personales, el desplazamiento y la estancia para una enseñanza de posgrado presencial. Como vicerrector potencié tanto como pude la enseñanza on-line en la UAB y participé, además, durante cuatro años, en la gestión de IUP, como miembro de su comisión ejecutiva y de su consejo de administración.
P.- El IUP es un ejemplo único en España de colaboración Universidad-Empresa en el ámbito de la formación de posgrado, ¿cuál es el balance que hace de estos siete años de colaboración?
R.- Creo que el balance es, con modestia pero conociendo la realidad, muy positivo. Para nosotros porque hemos tenido la capacidad de conectar con empresas de ámbitos diversos (aunque mayoritariamente del sector financiero) y hemos sabido entender qué tipo de formación no presencial buscaban y qué objetivos perseguían con ella. Para las empresas, me atrevo a decir que la experiencia está funcionando también satisfactoriamente: saben que pueden contar con nosotros para formar a su gente allí donde detectan necesidad; saben que pueden promocionar la carrera profesional de su gente también gracias a nuestra colaboración y, finalmente, saben que estamos abiertos para la mejor definición de sus objetivos formativos y profesionales. Nos interesa que mejoren y, de paso, mejorar nosotros con ellas.
P.- ¿De qué aspecto del desarrollo del IUP se siente más satisfecha la Universidad Autónoma de Barcelona?
R.- La UAB siente con especial satisfacción que el IUP haya servido para materializar una alianza estratégica alrededor de uno de sus objetivos fundacionales: la enseñanza de la mayor calidad posible y lo más cercana posible al estudiante, y lo haya hecho con interlocutores de privilegio en este sector en España y en el mundo, así vemos nosotros, en sus respecticos campos punteros y de especialización, a la Universidad de Alicante, a la Universidad Carlos III de Madrid y a Santillana.
P.- Buscar la mejor formación.
R.- Actualmente, el ámbito de la educación está viviendo momentos de cambio ante la entrada en vigor de la Declaración de Bolonia. Son muchos los alumnos que buscan una formación de calidad y se preguntan cómo se verá afectado su título Máster. Joan Gómez Pallarés aconseja a los estudiantes que busquen la mejor formación posible, al mismo tiempo destaca que “aunque en estos momentos vivamos atisbos de indefinición y de crisis de crecimiento del Espacio Europeo de Educación Superior, la convergencia de todos los títulos y su reconocimiento es el camino que acabará siendo realidad”.
P.- En el 2006, el IUP realizó el Estudio sobre la Demanda Internacional de Formación de Posgrado on-line en lengua española. Del informe se desprende que este tipo de formación de calidad y avalada por la excelencia académica de instituciones de enseñanza de primer orden, se ha erigido como una alternativa para profesionales de todos los continentes. Al mismo tiempo, el estudio destaca el retroceso sufrido en la demanda de programas de posgrado presenciales y a tiempo completo. ¿Cómo cree que será la evolución de la formación on-line y la formación presencial en un futuro?
R.- Yo creo que el avance de las TIC es imparable, también en el mundo de la educación. El grado seguirá siendo mayoritariamente presencial, pero el posgrado avanzará cada vez más, bien hacia una no presencialidad casi absoluta. Aunque bien entendida: no presencialidad no significa falta de contacto, al contrario, las herramientas informáticas para conectar a la gente, para que se vean a través del ordenador y hagan sus trabajos en grupo, para que asistan a conferencias etc., seguirán creciendo.
En ciertos casos, se avanzará hacia una enseñanza bimodal, mixta, que en función del tipo de conocimiento a compartir y el que tenga el estudiante, será más o menos presencial. Quien domine las herramientas de todo tipo que implican la no presencialidad, y el IUP sabe hacerlo, está bien situado para afrontar ese futuro.
P.- Estas expectativas de futuro han propiciado la aparición de empresas que ofrecen formación on-line, un alumno que va a hacer una fuerte inversión en un máster con la intención de mejorar su desarrollo profesional ¿qué debe tener en cuenta a la hora de elegir una institución para cursar un postgrado?
R.- Debe tener en cuenta la trayectoria de esa institución, debe conocer su implantación y liderazgo en este o aquél ámbito del conocimiento en el que se quiere formar y debe valorar, a partir de los datos que esa empresa tiene que facilitarle, cómo le ha ido la experiencia a quien ha cursado allí estudios antes que él. La empresa, al mismo tiempo, debe facilitar las cosas para que el precio de su formación no sea un obstáculo insalvable para poder cursarla.
P.- ¿Cuál es el reto de futuro de la Universidad Autónoma de Barcelona para el IUP?
R.- Seguir colaborando con la misma intensidad que hasta ahora para que el IUP mejore, para que sus cursos sean cada vez más y mejor valorados y para que los nuevos que se puedan implantar puedan satisfacer demandas realmente existentes en el mercado de la formación.
