Sólo Baleares supera al país gallego en la cantidad de basura que se incinera y es una de las autonomías en las que más se incumplen las directivas europeas sobre ecología. El colectivo ecologista Verdegaia alerta de que los datos recogidos en el último Informe de Sostenibilidad en España retratan una Galicia "cada vez más insostenible".
La atmósfera recibe hoy en día en Galicia un 18% más de amoníaco y un 7% más de óxido de nitrógeno que en 1990. En este tiempo sí se han reducido las emisiones de dióxido de azufre en un 39%, una sustancia que procede sobre todo de las chimeneas de las centrales térmicas de carbón. Pese a la rebaja, la comunidad gallega aún lidera la clasificación española en la emisión de este contaminante y aporta el 30% del total que se genera en España. Los datos del Informe de Sostenibilidad 2006 revelan que el nivel actual de estos vertidos aleja al territorio gallego de los objetivos fijados para 2010 por la Unión Europea.
Si la meta marcada por Bruselas queda lejos, mayor es la distancia que separa a Galicia de Kioto. Los gases de efecto invernadero que se pretenden reducir con el protocolo firmado en la ciudad japonesa crecieron un 37% desde 1990. En el conjunto de España el aumento fue aún mayor (45%), mientras que en la UE las emisiones se redujeron un 2%.
El estudio elaborado por la Universidad de Alcalá de Henares en colaboración con el Ministerio de Medio Ambiente ofrece cifras sobre depuración de aguas, biodiversidad, uso del suelo o consumo de energía. En relación con el tratamiento de los residuos, sus autores denuncian que ninguna autonomía practica "políticas ejemplares" para reducir la generación de basuras, aunque sus datos dejan a Galicia en uno de los peores lugares.
La comunidad es, después de Baleares, la zona donde más desechos se incineran, un 35% del total. Otro 30% de desperdicios se acumula en vertederos legales, por lo que las cantidades que se reciclan o convierten en compost son bajas. En 2004 fueron 53.000 las toneladas de basura que fueron a parar a depósitos incontrolados.
Galicia fue la segunda comunidad autónoma en 2003 y la tercera en 2004 en la que más procedimientos se abrieron por incumplimiento de directivas europeas. El gasto en medio ambiente por habitante es inferior a la media española y se invierte en el cuidado de los parques naturales menos de la mitad que en Asturias o Andalucía.
"Nuestra tierra usa los recursos naturales en exceso y con baja eficiencia, hace una contribución muy importante al cambio climático y sigue degradando el territorio y perdiendo biodiversidad", critica Verdegaia. El colectivo ha presentado a la Xunta varias propuestas para cambiar la situación, entre ellas la mejora de los estudios de impacto ambiental y de la aplicación de tasas e impuestos.
