Tiempos confusos para la radio española
Un estudio realizado por el Instituto Opina durante los primeros días de noviembre de 2003 señalaba que la mayoría de los españoles (54,8%) cree que hay pluralidad informativa en nuestro país.
Esa misma encuesta subrayaba a la radio como el medio más plural y dos de cada cinco encuestados consideraban que los mayores peligros para el pluralismo vienen del poder público.
Pluralidad informativa
Somos conocedores de la importancia de esa pluralidad informativa que asegura la libertad de expresión y la convivencia democrática. Una sociedad libre se construye a partir de canales abiertos y accesibles para los flujos de información que reflejen la pluralidad de ideas e intereses de todos los electores. Cuando hablamos de pluralismo informativo lo identificamos con la proliferación de medios: a mayor número de fuentes de información, mayor capacidad de elección de los ciudadanos.
La oferta disminuye
Desde el año 1989 se han incrementado el número de concesiones de frecuencias radiofónicas en España y, sin embargo, el panorama de la radio generalista española no parece más plural. La desaparición en la última década del siglo XX de Antena 3 Radio y la eliminación por absorción de la histórica Radio España en los primeros albores de este siglo, han provocado que en la actualidad dispongamos de sólo cuatro ofertas generalistas nacionales diferentes: RNE-Radio 1, COPE, Onda Cero Radio y Cadena SER. La estructura del mercado radiofónico en lo que se refiere a una oferta programática convencional ha pasado de un sistema de competencia pura (que sería deseable con un mayor número de medios), a un sistema de oligopolio puro, cada vez menos competitivo, pues sólo las públicas y la red de emisoras de la Cadena SER disponen de cobertura suficiente en toda la geografía del Estado.
Aumentan las publicaciones especializadas
Bien es cierto que la oferta de programaciones especializadas es mayor, disponemos de Radio 5, Radio Marca o Radio Intereconomía, aunque quien manda es la radio temática musical, especializada y segmentada. Y las cadenas musicales, como por ejemplo C40, CDial, C100, M80 y Kiss FM, obtienen cada día más frecuencias, mejor cobertura, muchos más oyentes, más beneficios con una forma de hacer radio más rentable.
El caso de Kiss FM
El lunes 15 de marzo de 2004 se comunica el resultado del laudo arbitral por el que Uniprex tiene que pagar 185 millones de euros a Radio Blanca. La cadena Onda Cero Radio fue el germen del proyecto de creación del gran grupo de comunicación de Telefónica, liderado por Villalonga en 1999. En septiembre de 2002, con Alierta como presidente y en pleno proceso de desvinculación de los medios de comunicación, Telefónica vendió el proyecto Villalonga al Grupo Antena 3, donde poseía el 25,1% y, en mayo de 2003, se desprendió de esta participación accionarial en favor de Planeta-de Agostini.
El segundo gran grupo radiofónico español ya no iba a estar liderado por el operador de telefonía y los problemas internos se traspasaban al Grupo Planeta. Y estamos ante un problema de 185 millones ¿Qué va a ocurrir si no se puede hacer frente al pago? ¿Dejará de existir Onda Cero Radio? La pluralidad en el panorama radiofónico generalista volvería a recibir un fuerte golpe, uno más, y, en estos malos tiempos para la radio española, dos millones cien mil ciudadanos que son oyentes de Onda Cero Radio quedarían tocados.
