La rigidez que ha caracterizado hasta ahora al sistema universitario español ha generado ciertas limitaciones como la dificultad de creación y supresión de estudios, la escasez de margen para que los estudiantes cambien la orientación elegida, la lentitud de tiempos de respuesta, o la insuficiente orientación para la formación a lo largo de toda la vida, describió Javier Uceda.
Frente a estas condiciones, explicó Javier Uceda, el entorno social precisa cada vez de mayor y mejor formación, orientada a unos perfiles heterogéneos, y capaz de responder a las demandas de una sociedad "más compleja, global y tecnificada, en la que todo cambia y los análisis con frecuencia se quedan obsoletos".
La Universidad se orienta al empleo
En los últimos años, las universidades han realizado un gran esfuerzo para adaptarse a estos cambios y orientar la formación universitaria al mercado laboral. Ferias de empleo, programas de prácticas en empresas, Centros de Orientación e Información de Empleo (COIE), o la elaboración de estudios sobre la inserción laboral de los graduados, son algunas de las iniciativas que las universidades españolas ya han puesto en marcha.
Como referencia, citó la experiencia de
El Espacio Europeo de Educación Superior, una oportunidad para el cambio
Uceda señaló que las universidades deben seguir trabajando para orientar la formación al mercado laboral y al empleo, y no sólo responder a la demanda, sino también anticiparse a ella. Para ello, el rector de la UPM apuesta por la flexibilidad del sistema, tanto en la orientación académica y profesional de los estudios, como en el diseño de los títulos universitarios y la movilidad de los estudiantes.
En este sentido, la reforma de los estudios universitarios para su adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior ofrece la oportunidad de incorporar mejoras que son "necesarias", añadió Javier Uceda. Además considera que el proyecto de reforma incluye la concesión de mayor autonomía a las universidades en el diseño de estudios, la posibilidad de reorientación académica permitida por esquema grado-máster, la promoción de la movilidad de los estudiantes, y el impulso de la formación a lo largo de toda la vida.
Javier Uceda propone ir más allá, y aprovechar esta restructuración para incorporar otros conceptos que deben estar incluidos en los currículos de los estudios universitarios, como la sostenibilidad, la seguridad y salud laboral, o la visión global y local. De este modo, concluyó el rector de la UPM, el sistema universitario debe responder con flexibilidad a la demanda cada vez más cambiante de nuestro país, y aprovechar la reforma para orientarse de forma prioritaria al mercado laboral y al empleo.
