La búsqueda se ha realizado, mes a mes, para el periodo 1970-2016 utilizando los términos "incertidumbre","corrupción", "confianza" y "riesgo" en España y dentro del área establecida por Google Trends para "Empresas e Industria".
Los niveles más elevados del indicador se producen alrededor de junio de 2012 con los problemas ligados al rescate financiero de nuestro país. Con anterioridad se pueden observar "cimas" por acontecimientos mundiales de especial repercusión en las economías avanzadas, como la crisis bursátil y la caída de Lehman Brothers que marcaron un 2008 financieramente turbulento.
Desde 2012 este indicador de incertidumbre percibida en Internet (y, más en general, en medios de comunicación) va marcando una tendencia marcadamente decreciente. con pequeñas oscilaciones (el repunte más importante se produce hacia junio de 2015) a pesar de los acontecimientos relacionados con resultados electorales, gobierno en transición, corrupción política,…Parece como si la alarma social en medios no se hubiera traspasado, con la fuerza esperada, al mundo de la empresa, que es el entorno al que hemos limitado la búsqueda en Internet. Al menos en parte, esto puede explicar la escasa incidencia con que la inestabilidad política a afectado al crecimiento de la economía española en 2016.
Si unimos en un indicador conjunto la incertidumbre empresarial, financiera, macroeconómica y percepción en Internet por los agentes económicos, los datos señalan nos encontramos en una fase de incertidumbre relativamente reducida. Respecto a los elevados niveles del periodo de crisis, con un índice global generalmente fluctuante entre 50 y 100, nos encontramos con posiciones que ahora se mueven, normalmente, entre 20 y 30.
Incluso si nos referimos al periodo de los últimos 24 meses y re-escalamos el indicador, hemos terminado el año 2016 por debajo de la media. Recordemos (ver post anteriores para mayor detalle) que la incertidumbre empresarial deducida de las encuestas de confianza está en niveles del orden de 35 puntos y con tendencia estable por el momento; la financiera muestra signos de inquietud y tiende a situarse por encima del promedio de los últimos 24 meses; la incertidumbre macro también señala una posible tendencia creciente, pero partiendo de niveles relativamente reducidos.
Con estos ingredientes el indicador global de incertidumbre para la economía española habría terminado el año sólo ligeramente por encima de los 40 puntos, aunque las expectativas pueden apuntar hacia progresivos aumentos.
Antonio Pulido http://www.twitter.com/@PsrA