El artículo, que recoge la opinión del rector de la Universidad Politécnica de Valencia, Juan Juliá, institución que recibió un total de ocho millones de euros para su plan de creación de un campus en torno a la investigación sanitaria y la sostenibilidad, "el objetivo es positivo, pero la forma en que se procedió en las deliberaciones es inaceptable". Así, asegura que las universidades regionales "están desalentadas".
"La Universidad Politécnica de Valencia aparece por delante de sus equivalentes en Madrid y Barcelona en las clasificaciones internacionales, por lo que resulta difícil creer que, tras el concurso, no aparezca como campus español de excelencia internacional", destaca. No obstante, reconoce que el programa supone un estímulo para la comunidad universitaria y un sello de aprobación que otorga el Gobierno.
En este sentido, Juliá exige que, en el futuro, el gobierno utilice un sistema de competencia "más transparente", que se basa en el ránking internacional de modelos, y que contribuya a aumentar el presupuesto global. "Los organismos de financiación deben reconocer la importancia de las clasificaciones internacionales", subraya.