Se trata este de un fenómeno poco frecuente en los campus españoles, pero que en la institución alicantina parece no dejar de repetirse. El primero en dimitir fue el primer rector que tuvo la Universidad de alicante, el catedrático de Geografía, Antonio Gil Olcina. Cesó de su cargo en 1985 por discrepancias con el Gobierno central por la dotación de profesores y desavenencias con el consejero socialista en valencia, Cipriá Ciscar.
A Gil Olcina, le sustituyó Ramón Martín Mateo, rector entre 1985 y 1993. Este ha sido el único de los cinco mandatarios que finalizó su mandato dentro de los plazos previstos.
Posteriormente, llegó al rectorado Andrés Pedreño, en el cargo entre 1994 y el año 2000. Pedreño dimitió tras plantar cara a la división de la universidad decidida por el ex presidente de
Tras el llegaría Salvador Ordóñez, rector entre 2001-04 que dimitió al ser nombrado secretario de estado de Universidades.
Y así llegamos al último rector de la institución, Ignacio Jiménez Raneda, que deja el cargo medio año antes de lo previsto. Pero que, sin embargo, se presentará a la reelección.
Antonio Marcilla Gomis ocupa ahora el cargo de rector en funciones hasta la celebración de comicios, previstos el próximo 22 de abril. Veremos, si la historia se repite.
Fuente: El País