Los fondos, cuyo documento más antiguo se remonta a 1861, tienen un especial interés para el estudio de la historia económica y financiera española y, en particular, de Cantabria. Incluyen la documentación del Banco de Santander y de otros establecimientos regionales, como el Banco Mercantil y el de Crédito Cántabro y fondos de otras 30 instituciones financieras que han formado parte de la entidad cántabra mediante fusiones o adquisiciones, explicó Botín.
La Universidad de Cantabria y el Banco Santander pretenden convertir este proyecto en una referencia para el estudio de la historia financiera y bancaria, al crear el principal archivo histórico de la banca española, que estará a disposición de la sociedad.
El presidente del Grupo Santander destacó la importancia de este acuerdo porque supone la continuidad de la colaboración y el trabajo conjunto con la Universidad de Cantabria y porque abre “grandes posibilidades” para la investigación y para la enseñanza especializada en banca.
Según Botín, también contribuirá a un mejor conocimiento de la “microhistoria del banco”, lo que es un “buen colofón” en su 150 aniversario. Afirmó que la Universidad de Cantabria es “uno de los tesoros más valiosos de la región” y se mostró “encantado” de firmar este acuerdo.
El rector destacó la positiva experiencia de mecenazgo que mantienen ambas instituciones y que, a su juicio, no beneficia solo a la comunidad universitaria, sino a toda
Fuente: EFE