La marca, creada por el Libro Blanco de las universidades catalanas, agrupará a modo de paraguas los ocho centros públicos de Catalunya y se desplegará en forma de convenios específicos bienales mediante objetvos concretos. Sin embargo, todas las universidades conservarán sus rasgos distintivos.
Según explicó hoy la presidenta de la Acup y rectora de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), Imma Tubella, los programas específicos del Plan Bianual 2010-2011 se centrarán en la creación de un observatorio internacional de indicadores; una plataforma conjunta de postgrado –la etapa en la que más pueden competir en el extranjero–; un Espacio Mediterráneo de Educación Superior e Investigación, y la cooperación para el desarrollo con países subdesarrollados.
De hecho, estas acciones, que deben desplegarse los dos próximos años, ya han empezado a aplicarse. La Acup ya ha consolidado el programa de Cooperación en gestión universitaria con cinco universidades africanas; además, ha llevado la marca Universitat de Catalunya a ferias internacionales como la americana Nafsa y la europea EIAE.
La marca venderá internacionalmente las áreas en las que Catalunya es más «potente», como la Biomedicina, la Nanotecnología y la Fotónica, disciplinas que contarán con el prestigio de los centros de investigación ubicados en Catalunya e infraestructuras como el Sincrotrón Alba, el Centro de Regulación Genómica y el centro de Supercomputación.
Dos millones de euros
La financiación de los proyectos hasta 2011 será de unos dos millones de euros, que aportarán las ocho universidades, aunque posteriormente podrían firmar convenios con la Generalitat y el Gobierno para su reembolso.
Durante el primer semestre de 2010, la Acup se ha propuesto también la creación de una oficina en la Comisión Europea (CE) para la formación superior y la investigación, que llevará a cabo conjuntamente con la Generalitat.
Tubella destacó que la colaboración entre universidades, lejos de suponer un coste añadido, crea sinergias entre las universidades, que juntas pueden lograr metas de otro modo «impensables». Sin embargo, el rector de la Pompeu Fabra (UPF), Josep Joan Moreso, reclamó que haya más incentivos financieros a la cooperación universitaria.
Según el secretario ejecutivo de la Acup, Josep Maria Vilalta, el objetivo del Plan de proyección internacional es convertirse en diez años en el referente universitario «de calidad» del sur de Europa, que permitirá colateralmente escalar posiciones en los rankings internacionales a los centros catalanes.
