El adelanto de la edad de jubilación anticipada, que previsiblemente entrará en vigor el 1 de julio después de superar los trámites parlamentarios, se aplicará de forma transitoria hasta 2029, ya que durante estos años se irá incrementando de forma gradual hasta los 65 años.
Así, Alemania tendría segunda edad de jubilación más temprana de la zona euro, por detrás de Francia, quien pasó de jubilarse a los 60 a los 62 años bajo el mandato de Nicolas Sarkozy, con un mínimo 43 años cotizados.
Los italianos sin embargo, mantiene una edad de jubilación parecida a la de los españoles: 66 años. Antes de la crisis había edades diferentes de jubilación para hombres y para mujeres, 65 y 62 respectivamente. Desde 2012, este diferente baremo ha sido igualado y, al mismo tiempo, la edad legal se ha establecido en dos años más de lo que antes regía para los hombres: 66 años. Lo mismo que en Portugal, que también aumentó de 65 a 66 años.
El país más afectado por la crisis de la deuda europea también ha modificado su sistema de pensiones en los últimos años asemejándose al de España. Tanto Grecia como España han subido su edad de jubilación de los 65 a los 67 años, debido a gran crisis que azota con severidad a los países del Mediterráneo.
Reino Unido e Irlanda lideran el podio de los trabajadores que trabajan hasta una edad más avanzada. Ambos países subieron la edad para retirarse hasta los 68 años. David Camerona delantó a 2016 el establecimiento de los 66 años como edad legal, equiparándose también las edades hasta ahora diferentes de retiro para hombres y mujeres. Además, para el año 2044 la edad de jubilación quedará establecida en 68 años. A esta cifra se llegará de forma paulatina, a lo largo de las siguientes décadas, aunque los tories ya han anuciado que puede que se adelante y quede fijada antes de esa fecha todavía lejana de 2044. Por su parte, el Gobierno irlandés se comprometió con los organismo internacionales que financiaron su rescate —Banco Central Europeo, la Comisión Europea y el FMI— a elevar la edad de jubilación de los irlandeses a los 66 años en 2014, los 67 en 2021 y los 68 en 2028.
La canciller alemana, Angela Merkel, compareció ayer ante el Bundestag para presentar las primeras reformas de su Gobierno de coalición, desde las pensiones hasta la energía. Merkel ratificó su compromiso de que el país no incurrirá en nuevas deudas a partir de 2015. "Sin unas finanzas sólidas no hay futuro", resumió. Por otro lado, anunció una cuota femenina en la dirección de las grandes empresas desde 2016.
EL PAÍS resalta que "el SPD fuerza a Merkel a un giro social", que incluye la reducción de la edad de jubilación, la mejora de las pensiones para las madres y las prestaciones para las personas dependientes. EL MUNDO subraya que "Merkel defiende su giro a la izquierda".
