Los arquitectos rechazan el Anteproyecto de Ley de Colegios y Servicios Profesionales. Pese a que se trate de una ley de servicios profesionales, el texto "sólo habla de edificación, que es una actividad productiva", cuando "no existe la profesión de ´edificador´", afirman en una nota el Consejo Superior de Colegios de Arquitectos.
El Anteproyecto, aprobado el pasado 2 de agosto, podría, según ha explicado el Consejo, eliminar la exclusividad de la que gozan actualmente los arquitectos para redactar proyectos de edificación, una posibilidad contra la que se plantó el grueso de profesionales, con Moneo a la cabeza, según publica EL MUNDO.
El texto, dicen, anticipa "inciertos cambios posteriores de leyes básicas que han demostrado su utilidad en la ordenación de importantes sectores de actividades de interés público", los cuales, en el caso de la Arquitectura, "no responden a ningún requerimiento de ámbito europeo".
Los arquitectos rechazan "enérgicamente" el anteproyecto de ley defendido en último el Consejo de Ministros por Luis de Guindos, sus planteamientos y desarrollo escrito, pues avanza una Ley que, de no corregirse, "violentaría de manera clara el actual sistema de garantías a los ciudadanos", dicen.
El principal error del texto es que ignora la función de control y garantía pública que realizan los colegios profesionales, "sin coste para el Estado", añaden, y manifiesta "el desconocimiento respecto de la singularidad y la excelencia del modelo español".
Además, los arquitectos creen que la ley daría la puntilla al sector, pues llega "en el momento más delicado", no sólo para la Arquitectura, sino a otras profesiones colegiadas que también se ven perjudicadas.
Aunque reconocen que es necesaria una reforma de las corporaciones profesionales, "debemos transmitir la trascendencia del despropósito del Anteproyecto de Ley", el cual "no satisface demanda alguna".
Grupo de trabajo
El anteproyecto regula que se va a constituir un grupo de trabajo específico para la determinación de las atribuciones profesionales, unas atribuciones que enfrentaron a arquitectos y otras profesiones asociadas a la ingeniería.
El Consejo de colegios de arquitectos, su máximo órgano de representación, espera establecer puentes de diálogo con el Gobierno, pues estiman que parte de sus argumentos "han sido entendidos por una parte importante de sus componentes".
