La CEOE no se pronunció ayer y otras patronales valoraron con cautela los resultados, ofreciendo una imagen de tranquilidad, pidiendo en general diálogo para la gobernabilidad, mientras la banca pidió que "no se dilate la firma de pactos".
En cambio, los sindicatos urgieron prioridad a la educación tras estas elecciones autonómicas y locales. Según CCOO, los resultados "abren una oportunidad para que se conformen gobiernos locales y autonómicos donde se prioricen a las personas, en aras a una mayor justicia social y se impongan unas formas de hacer política en las que primen la búsqueda del máximo consenso, no solo entre las distintas formaciones políticas, sino también con los representantes de la sociedad, garantizando así una democracia más participativa y sana".
A su juicio, "la ciudadanía ha expresado con claridad su malestar ante unas políticas que han repartido muy injustamente las cargas de la crisis. Es innegable que el desempleo; la emigración de nuestros jóvenes mejor formados; la pérdida de derechos laborales, sociales y ciudadanos; el deterioro de los servicios públicos, especialmente los educativos y sanitarios; el incremento de la injusticia, la desigualdad y la pobreza; el maltrato al que se ha sometido toda expresión cultural,… han estado muy presentes en la opinión de la ciudadanía a la hora de emitir su voto. Igualmente, estas elecciones han supuesto una nítida impugnación a una forma de hacer política prepotente y autoritaria que ha despreciado el diálogo, la negociación y el consenso con la sociedad y que ha facilitado una connivencia entre el poder político y económico que ha enquistado la corrupción como si de un fenómeno nacional se tratase.
Por su parte, UGT expresó su alegría por el fin de "la imposición del poder sin diálogo para dar paso a la práctica del diálogo y del acuerdo para gobernar".Una tarea de gobierno que, según añade, tendrá que compatibilizar las expectativas de cambio social y los compromisos con el empleo de calidad, con la aún difícil situación económica de nuestro país y las dificultades económicas de los Ayuntamientos y las Comunidades Autónomas.
Las diversas asociaciones de trabajadores autónomos reclamaron que los intereses de los ciudadanos estén por encima de las estrategias políticas.
ANPE, Sindicato de la Enseñanza Pública y El Defensor del Profesor, declaró que la fragmentación partidista en la formación de gobiernos obliga a los partidos a pactar y dialogar, elementos claves de este tiempo y de la democracia."Estas elecciones han deparado un nuevo mapa político como consecuencia de la aparición de nuevos partidos emergentes y el desgaste de los gobiernos por los recortes en políticas sociales, la corrupción y la adopción de medidas impopulares, mal explicadas a la ciudadanía, en una época de profunda crisis económica. Nada será igual a partir de ahora y un nuevo tiempo de hacer política se inaugurará tras las elecciones del 24M.
Ante la nueva configuración de los gobiernos autonómicos y locales, ANPE exige: 1) Convertir a la Educación en el centro de las prioridades políticas y sociales, que la preserven de los recortes y ajustes presupuestarios, recuperando la inversión educativa, a la vez que se rentabilice una gestión óptima de los recursos educativos para que reviertan en la mejora del sistema educativo.2) Una apuesta decidida por la Enseñanza Pública y su profesorado. Que incluya la derogación de los decretos de recortes, actualmente vigentes, que contempla medidas perjudiciales para la Enseñanza Pública, y que permitan la reposición de las condiciones laborales perdidas y se compense por los esfuerzos realizados y exigidos al profesorado.3) Una mayor coordinación entre las políticas autonómicas y estatales de manera que no se resienta la cohesión del sistema educativo y que garantice la igualdad de oportunidades en todo el Estado.Y 4) un pacto de mínimos que siente las bases para dotar de estabilidad al sistema al margen de cambios de gobierno.
Reacciones de los mercados
La destacada influencia del riesgo de impago de Grecia en esa evolución bursátil se refleja porque el IBEx 35 acabó el lunes con una caída del 2,1%, mientras Atenas cedía un 3,11%, Milán un 2,09%, Lisboa un 1,75% y París un 0,50%. Las bajas persisten este martes por la mañana, cuando el EuroStoxx retrocede el 0,7 y el IBEX casi otro 1%.
No obstante, la mayoría de los diarios españoles hablan de temor de los inversores ante el nuevo e incierto mapa político y las consecuencias que un cambio de políticas puede tener sobre las concesiones públicas, la regulación sobre vivienda, la imposición de nuevas tasas a las eléctricas o las medidas antidesahucios. Y destacan que la prima de riesgo subió cinco puntos básicos, hasta los 123, en tanto la rentabilidad del bono subió hasta el 1,837%. Eléctricas, constructoras y bancos fueron los valores más castigados en una jornada en la que Wall Street y plazas como Londres o Frankfurt cerraron por ser día festivo. El resto de mercados periféricos también registró fuertes pérdidas.
Según CINCO DÍAS, "los banqueros comparan el vuelco en el mapa político con lo sucedido en 1982 cuando ganó Felipe González". EL ECONOMISTA apunta que los empresarios "piden reducir costes laborales y una rebaja de impuestos".
"Grecia y los resultados electorales castigan la Bolsa y la deuda española", titula EL PAÍS. "El 24-M ´hiere´ al Ibex", dice EL MUNDO, que habla de "inquietud" en las grandes empresas, "que esperaban más de Ciudadanos y temen la incertidumbre", y reclaman que "PP y PSOE tienen que pactar". "La incertidumbre lastra a eléctricas, constructoras y banca", destaca ABC. "Grecia y el voto en España inquietan a las bolsas periféricas", dice LA VANGUARDIA. "El dinero se inquieta", titula CINCO DÍAS, que incide en que "los inversores recelan del panorama político tras las elecciones". Según destaca EL ECONOMISTA, "el resultado electoral frenará las inversiones y el crecimiento" y "la necesidad de pactos y compromisos dará lugar a un aumento del gasto público".
