Hasta ahora estas enseñanzas, a las que la Comunidad destina más de 2,5 millones de euros anuales, dependían orgánicamente de la Dirección General de Educación Secundaria y Enseñanzas Profesionales pese a tener la consideración de licenciaturas.
Con esta decisión, Madrid se convierte en la primera comunidad en integrar las enseñanzas artísticas en la Universidad satisfaciendo así las demandas de los artistas titulados.
Además de potenciar su profesionalización, la medida tiene como objetivo "facilitar una mejor formación de los futuros artistas, tanto en métodos como en contenidos", ha señalado Aguirre.
Ello supone, asimismo, la adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior, más conocido como Plan Bolonia, que reconoce cinco estudios de grado de enseñanzas artísticas y la posibilidad de cursar estudios de doctorado.
Aguirre ha destacado la "gran oportunidad" y el "privilegio" que se abre a los alumnos de estas enseñanzas, que ahora podrán, mientras cursan sus estudios, participar en festivales y certámenes de danza o de teatro y que esta participación sea tenida en cuenta en sus expedientes académicos.