P.- ¿Por qué necesita un psicólogo este máster?
R.- Siendo profesionales de un determinado campo, en este caso la psicología, resulta casi inexcusable que el experto sea conocedor de los diferentes enfoques que se utilizan. De esta manera, se pueden beneficiar de diferentes maneras los psicólogos más séniors y aquellos más noveles.
Los más noveles tienen la oportunidad de “con conocimiento de causa” poder elegir qué modelo se ajusta más a sus necesidades como psicólogo, puede resolver la cuestión de qué modelo funciona mejor y por qué, ya que durante el curso se expondrán los diferentes modelos de la mano de profesionales que los utilizan a diario en su práctica clínica.
Los psicólogos más séniors pueden encontrar en este máster una vía de reciclaje que incluya su propio modelo y que, además, incluya las alternativas más utilizadas en nuestro campo. El objetivo en este caso es generar flexibilidad a la hora de intervenir. Consideramos que tras una revisión de los modelos, los alumnos ganarán en estrategias y tendrán visiones complementarias de los trastornos que pueden ser útiles para ayudar al mayor número de pacientes.
Finalmente, tanto unos (noveles) como otros (séniors) pueden descubrir los puntos fuertes de cada modelo y no realizar la crítica fácil que hacemos estancados en nuestra orientación y, por supuesto, conocer los puntos débiles para que al criticar determinada orientación lo hagamos desde el conocimiento y no desde los estereotipos.
P.- ¿Qué psicoterapias impartirás?
R.- En mi caso abordaré las terapias cognitivas y conductuales, distinguiéndolas puesto que podemos encontrar en ellas diferentes aplicaciones.
El objetivo es hacer un análisis crítico de ellas, exponiendo los mecanismos de génesis, de mantenimiento y por supuesto de tratamiento para los diferentes trastornos psicológicos. Todo ello en un entorno que esperamos que sea muy colaborador e interactivo por parte de todos los asistentes y que permita adquirir conocimiento, pero también aplicarlo, con representaciones de casos reales durante los cursos para reciclar o aprender estrategias específicas que nacen desde esta orientación para la resolución, tanto de situaciones específicas dentro de la relación terapéutica, como de las diferentes fases de terapia.
P.- Además, el máster cuenta con prácticas profesionales. ¿Qué importancia tienen en el proceso de aprendizaje?
R.- Ésta probablemente es la pregunta más fácil de responder y probablemente también el gran reclamo del máster. Durante años los psicólogos hemos leído, hemos asistido a cursos monográficos, a máster y/o postgrados y cuando nos planteamos empezar a ejercer siempre aparece el miedo (por otra parte inevitable). Esos métodos si bien son útiles parecen escasos y por eso en este máster se asume el reto de procurar incluir el medio más útil para manejar las dudas de la propia ejecución, la práctica. Porque para saber caminar, necesitamos caminar y no sólo que nos expliquen como hacerlo.
En general, los alumnos afirman que no saben qué hacer con el caso, tienen mucha información y no saben como estructurarla. Con estas prácticas profesionales lo que se ofrece es la oportunidad de compartir con un psicólogo experimentado la evolución de casos reales. Esto permite a los estudiantes tener una visión más global y práctica de los trastornos psicológicos y no desde los libros.
Fuente: Departamento de Comunicación de ISEP
