jueves,18 agosto 2022
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Cotec 2018

Sin innovación no hay crecimiento sostenido

Futurolandia
Para cualquier economía, sociedad, empresa o individuo el impulso innovador es su salvoconducto para transitar hacia el futuro. Renunciar a la innovación es quedarse atrapado en el tiempo. Retrasarse en el impulso innovador es alejarse de posiciones de liderazgo como persona, como empresa o como país. No toda innovación garantiza el éxito; pero no innovar o hacerlo parcialmente y con retardo,incrementa los riesgos de fracaso ¿Vivimos en España un momento de pérdida de ese impulso innovador?

El impulso innovador de un país puede medirse de muy diversas formas, utilizando indicadores variados sobre esfuerzo, entorno y resultados. Sin embargo, parece inevitable revisar estrategias cuando los tres  indices globales de innovación más reconocidos son coincidentes en su diagnóstico de retrasos en situación y tendencia, como es el caso de nuestro país.

El Global Innovation Index que elaboran conjuntamente, para 140 países, una escuela de negocios (INSEAD),  una universidad (Cornell) y una organización especializada en propiedad intelectual (WIPO), sitúa a España en el puesto 28 con 49 puntos, lejos de los más de 60 puntos de las economías más innovadoras (como Suecia, Holanda, EEUU o RU), pero también por debajo de la mayoría de países de la Eurozona, en compañía de Italia o Portugal.

La puntuación se obtiene a través de 85 indicadores que miden la situación relativa institucional(política, regulatoria y de entorno empresarial), el esfuerzo en capital humano e investigación, la disponibilidad de infraestructuras(TIC y generales), el desarrollo de mercados (créditos, inversión y competencia), el esfuerzo empresarial en innovacióny los resultados obtenidos encreación y difusión del conocimiento, así como enproductos creativos y activos intangibles.

Nuestros mejores registros los obtenemos en aspectos tales como estudiantes universitarios, gastos en software de ordenadores, diseño industrial, servicios públicos on-line o infraestructura TIC. Los peores en aspectos tales como movilidad de estudiantes, esfuerzo inversor, facilidad para constituir nuevas empresas u obtención de créditos, mejoras de productividad o colaboración universidad/empresa.

Otro indice de impulso innovador es el que publica una institución líder en información y análisis financiero (Bloomberg Innovación Index)  con resultados para más de 50 países a partir de sólo seis indicadores: gastos enI+D, VA en manufacturas, empresas de alta tecnología, educación de tercer grado, personal investigador y patentes.

España se sitúa en el puesto 29 con 63 puntos, lejos de  países líderes (más de 80 puntos) como Corea del Sur, Suecia, Alemania o Singapur y nuevamente compartiendo posiciones con Italia, Portugal y Grecia.

Por último me referiré al European Innovation Scoreboard de la Comisión Europea, que valora la situación en los 28 países de la UE a partir de 27 indicadores referidos a condiciones  deentorno(recursos humanos, atractivo de los sistemas de investigación o del ambiente innovador),inversiones(financiación y esfuerzo),  actividades de innovación(activos intelectuales, conexiones o innovadores)  e impactos(en el empleo o en las ventas).

Nuestro país se sitúa en el puesto 17, formando parte de los innovadores moderados, entre los que también se encuentran Italia o Portugal.  Con 78 puntos, nos situamos  no sólo detrás de líderes en innovación (más de 120 puntos para Suecia, Dinamarca, Finlandia u Holanda), sino también de innovadores fuertes (por encima de los 100 puntos de promedio UE).

Nuestros  puntos débiles comparativos parecen situarse  en el capital-riesgo, en los gastos en innovación de las empresas (en particular los que no son I+D), la colaboración público-privada (p.ej. publicaciones conjuntas) y la relativa escasez de innovadores entre las  PYMES en procesos/productos o marketing/organización. Por el contrario destacamos en recursos humanos disponibles, banda ancha, formación empresarial en TIC, marcas comerciales o publicaciones científicas internacionales en colaboración.

Pero no sólo es importante la comparación ínter-países, sino que también es relevante la ínter-temporal. Así en los siete últimos años la evolución de los factores innovadores en España relativa al esfuerzo en el conjunto de la UE, nos proporciona claves de en qué puntos ganamos o perdemos posiciones. Las principales señales de peligro (retraso adicional respecto a la media UE) se localizan en capital-riesgo, co-financiación público-privada, estudiantes extranjeros de doctorado, innovación en las PYMES, gasto público en I+D o gasto empresarial tanto en I+D como en otra innovación y diseño.

Para los más interesados en estos temas me remito a mis últimos post :

https://www.antoniopulido.es/innovacion-carro-los-bueyes/

https://www.antoniopulido.es/complejo-ecosistema-la-innovacion/

https://www.antoniopulido.es/innovacion-frustrada-gatopardismo-disfraces-desenfoques/

Con motivo de la elaboración del Informe Cotec 2018 se ha presentado un diagnóstico de situación e impulso de la innovación en España, con particular atención al esfuerzo en I+D. Su dictamen  es la opinión de un observador especialmente cualificado y de amplia trayectoria, desde su constitución hace más de 25 años por iniciativa del propio rey Juan Carlos.

El punto de partida es reconocer que "dar la espalda a la I+D es un coste de oportunidad que no se puede permitir ninguna empresa, institución o país que aspire al liderazgo" . Y España, con sólo un 1,2% de su PIB dedicado a I+D (frente al 2% promedio de la UE-28), está poniendo en peligro su futuro:

"Un año más la I+D no está acompañando al crecimiento económico de nuestro país…La inversión se mantiene -por sexto año consecutivo- por debajo del crecimiento del PIB, lo que nos aleja otra vez de los países de nuestro entorno y del conjunto de la UE".  Entre 2009 y 2016, la UE-28 aumentó su inversión total en I+D en un 27,4%, mientras España la redujo en un 9,1%, según datos oficiales. La inversión pública, incluso ha disminuido un 60% durante ese periodo

Aunque la inversión en I+D sea sólo un componente del impulso innovador de un país, su carácter estratégico lo convierte en una referencia esencial. Si se debilita el esfuerzo en I+D, se pone en peligro el edificio entero de la innovación. Mi opinión ya la conocéis por post recientes:

https://www.antoniopulido.es/id-sabemos-de-que-hablamos/

https://www.antoniopulido.es/universidad-innovacion-y-capital-intangible/

https://www.antoniopulido.es/investigacion-innovacion-largo-camino-recorrer/

Ese largo camino a recorrer para potenciar la innovación tecnológica, económica y social, hunde sus raíces en un esfuerzo sostenido en I+D, aunque no sea suficiente para garantizar su efecto multiplicador. Como bien subraya Cotec, el complejo mundo de la innovación incluye todo cambio (no solo tecnológico), usado en el conocimiento (no solo científico), que genera valor (no solo económico).

Antonio Pulido http://www.twitter.com/@PsrA

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