En ella, nos presenta a la señora Dolors, una cocinera jubilada que vive en su pueblecito natal de Aviá, en el Berguedán catalán. A lo largo de su vida ha servido como cocinera en diversas casas como la del Prefecto de ls Sûrete francesa, el Intendente Mayor de Scotland Yard o la del Cardenal Tebaldi, jefe de los servicios de inteligencia vaticanos. Tan ducha en crímenes como en guisos, suele aconsejar a la policía cuando las cosas se tuercen o requieren la visión aguda y sabia de una detective campesina, como le gusta autodefinirse.
En el presente libro, el primero de una colección dedicada a ella, deberá enfrentarse al asesinato de una chica joven hallada en el autocar que va de Berga a Barcelona. Sin ningún tipo de documento que la identifique, y con muestras de haber tenido numerosas relaciones sexuales, la senyora Dolors se enfrentará a lo largo de la investigación a los misterios macabros que rodean Cal Mort o a una siniestra biblioteca privada barcelonesa frecuentada por la élite catalana.