"Sé que cuento con la confianza del presidente Mariano Rajoy", afirma en su defensa, y culpa al "inmovilismo" del PSOE de las críticas recibidas tras la presentación del Proyecto de Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa. "Los socialistas están convencidos de que son los titulares únicos y los únicos posibles de las normas educativas", señala.
Wert adelanta que una vez aprobada la LOMCE, su departamento abordará "la reforma universitaria tanto en lo que se refiere a gobernanza como a bloqueo de plazas de profesor y a la financiación".
Wert dice en esta entrevista que no cree que haya cumplido como ministro porque quedan muchas cosas por hacer. El ministro destaca que “la Lomce cumple una parte de las necesidades de reforma que existen en el campo educativo, pero hay otra parte que pretendemos abordar que no requiere cambio normativo y que busca mejorar la calidad de nuestras universidades. Queda mucho trabajo por hacer”.
El ministro destaca que cuando acepto el nombramiento sabía que no “entraba en unos días de vino y rosas. A lo mejor no me hice a la idea de que iba a ser tan duro, pero tenía claro que no iba a tirar la toalla sin conseguir mis objetivos”.
En esta entrevista en La Razón destaca que cuando deje de ser ministro abandonara la política porque “no tengo edad de tener más ambición política, pero realmente nunca la he tenido. Acepté este cargo no para hacer una carrera política, sino para hacer una serie de cosas que me parecían y me siguen pareciendo necesarias”.