Según Wert,el requisito general será aprobar la evaluación final de Bachillerato (imprescindible de cara a conseguir también el título)”, aunque existirán otras fórmulas para regular el acceso desde la FP de Grado Superior o a través de los Bachilleratos Europeo e Internacional.
La segunda novedad acordada en el encuentro consiste en que las universidades determinen “sus propios criterios y requisitos de acceso”, en especial para aquellas titulaciones en que la demanda sea superior a la oferta de plazas.
En este caso, podrán decidir si quieren establecer la realización de exámenes extra o de entrevistas personales, si optan por exigir una nota determinada en ciertas asignaturas, o por otros mecanismos, señaló Wert a modo de ejemplos.
Ninguno de estos requisitos, sin embargo, “podrá atentar contra la igualdad de oportunidades basada en el mérito y capacidad”, prosiguió, ni ir en contra del “distrito universitario único”, por el que todos los alumnos pueden pedir su ingreso en cualquier universidad española, con independencia de su lugar de residencia.
Con todo, el Ministerio ha concedido un plazo extra a las comunidades autónomas “para refinar sus propuestas” en este sentido”, y así contar con más aportaciones a la hora de establecer dichos procedimientos de admisión.
Esto supondría que Educación está dispuesta a negociar la demanda de la Generalitat de “ajustar” la libertad de fijación de criterios que se otorga a las universidades “con la competencia de coordinación universitaria” que corresponde a Cataluña, o a estudiar propuestas como el establecimiento de exámenes comunes por ramas de conocimiento, tal como propone Castilla y León.
En coherencia con el mes extra que se ha otorgado a las consejerías de Educación, “un día antes o después de celebrar dicha conferencia sectorial (a principios de diciembre) volveremos a reunir a la Conferencia General de Política Universitaria para concretar este aspecto”, concluyó Wert.
