Según sus palabras, la finalidad que persigue este esfuerzo "sin duda merece la pena" por muy largo y difícil que se vislumbre el camino, pues lo que está en juego es "abrir un horizonte de esperanza" a las sociedades en general y a la mujer en particular. "El trabajo que tenemos por delante es duro y el camino, largo; pero el esfuerzo habrá merecido la pena. Siempre merece la pena. Porque trabajar por la igualdad es trabajar por la justicia", ha asegurado.
Con estas palabras ha concluido la ministra su intervención ante el plenario de la 58ª Comisión para la Condición Jurídica y Social de la Mujer, foro que ha aprovechado además para celebrar diversas reuniones bilaterales con el fin de enumerar y explicar la estrategia que el Gobierno del Reino de España está llevando a cabo para consolidar la igualdad de mujeres y hombres. Una de dichas entrevistas ha sido con la directora ejecutiva de ONU Mujeres, la sudafricana Phumzila Mlmabo-Ngcuka, quien se ha comprometido a visitar próximamente España para conocer de primera mano las medidas que se están desarrollando a favor de la igualdad y contra la lacra de la violencia de género.
Precisamente la lucha contra los malos tratos a las mujeres constituye "un compromiso inamovible del Gobierno de España", ha indicado la ministra, para quien se ha erigido en prioridad la puesta en funcionamiento de las medidas de la Estrategia para la Erradicación de la Violencia sobre la mujer, aprobada en verano del año pasado y uno de los ejes del Ministerio en defensa de los derechos de las mujeres, tal y como ha señalado durante su comparecencia ante el plenario de Naciones Unidas. Los más de 1.500 millones de euros de la iniciativa para combatir la violencia de género durante los próximos tres años se complementarán con los más de 3.000 millones que componen la memoria económica del Plan para la Igualdad de Oportunidades, ya visto por el Consejo de Ministros. .
Ambos proyectos, claramente relacionados, ahondan en los que para Ana Mato son los ámbitos "imprescindibles" del empeño por la igualdad: educación, empleo, conciliación y la lucha contra la violencia de género. Educación por cuanto el Gobierno apostará por inculcar valores como el respeto y la no discriminación desde la adolescencia y con el apoyo de la comunidad educativa. Empleo toda vez que el Gobierno pretende reducir las diferencias que existen en la tasa de actividad y en la calidad de los puestos de trabajo. .
Para el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, tan importante es que las mujeres entren en el mercado laboral como que consigan empleo estable. Por ello, en el marco de la inserción socio-laboral de las víctimas de violencia de género, se dialogará con las empresas para que compartan los mismos objetivos en un contexto económico que apunta a tendencias más positivas. .
La conciliación cristalizará en muchas de las medidas del Plan Estratégico para la Igualdad de Oportunidades, en el que uno de los ejes que brilla con luz propia es el de la compatibilidad entre la vida familiar o personal y el plano laboral. Más mujeres en puestos de dirección por cuanto atesoran una gran preparación académica y más mujeres con facilidades para que desarrollen su faceta profesional al margen de las decisiones personales o familiares que adopten en el uso de su libertad. El emprendimiento femenino será una prioridad, por lo que desde el Ministerio se fomentará la consecución de crédito y el asesoramiento, ya no sólo para hacer realidad un proyecto, sino también para que éste se consolide. .
Defensa de la igualdad en el mundo.
Las líneas esenciales de la política social del ministerio que dirige Ana Mato tienen su reflejo, además, en la cooperación. "La política de cooperación internacional que promueve el Gobierno se ha convertido en un referente para las políticas de desarrollo y en los temas de género", ha aseverado. Y esos pilares de la cooperación se manifiestan tanto en el cauce de colaboración abierto con ONU Mujeres como en otros proyectos de calado internacional, muy especialmente los Objetivos del Milenio. La ministra ha remarcado al respecto que España bregará por acercar estas metas, entre otras razones porque dispone de una muy extensa red de recursos. .
Precisamente el tema prioritario de la 58ª Comisión para la Condición Social y Jurídica de la Mujer es la implementación de los objetivos del Desarrollo del Milenio para las Mujeres y las Niñas, en lo que el Gobierno de España, según ha recalcado Mato, ejercerá su "firme compromiso", pues "la discriminación contra las mujeres y las niñas sigue existiendo de manera universal, lo que unido a las múltiples discriminaciones no sólo asociadas al sexo, sino también a su edad, raza, orientación sexual o religión, hace que las mujeres y niñas sean especialmente vulnerables frente a otros fenómenos relacionados con la discriminación, como son la pobreza y la exclusión social", ha explicado la ministra. .
Ante ello, Mato ha dejado claro que "la reducción de las desigualdades entre mujeres y hombres es una de las prioridades de la acción política interior y exterior del Gobierno". La titular de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad ha recordado que España ha impulsado y apoyado fondos innovadores que han desarrollado, a su vez, más de 130 programas en todo el mundo, de los que se han beneficiado de forma directa más de 9 millones de personas. .
La colaboración con ONU Mujeres continuará, algo que tendrá su visibilidad con motivo de la visita que en próximos meses haga a España su directora ejecutiva. Proyectos en común, renovadas apuestas y trabajo coordinado serán los ejes sobre los que se sustente la relación, siempre con el objetivo de luchar por la igualdad y contra la violencia que siguen sufriendo las mujeres y las niñas en tantos rincones del mundo. Para la ministra, las políticas por y para la mujer son "de Estado", y cuantos más se impliquen, mejor. "Estamos en el camino adecuado, pero aún quedan muchos retos pendientes", ha sentenciado. .
