Esta renovación incorporando perfiles profesionales con conocimiento del sector se inició en diciembre pasado, al incorporar como consejero a Pascual Fernández, y en junio al ingeniero Industrial Jaime Sánchez Gallego. Previamente, en septiembre de 2019 se abordaron los primeros cambios en el Ente, a quien corresponde ejercer las potestades públicas necesarias para la correcta prestación del servicio y realizar la función de control y supervisión respecto de Canal de Isabel II, S.A. Así se incorporaron a su Consejo de Administración responsables del Gobierno regional con mayor vinculación con el agua, como es la propia Consejería de Medio Ambiente, así como la Agencia de Seguridad y Emergencias, al tratarse de una infraestructura crítica, o la Consejería de Vivienda y Administración Local, por la importancia del servicio que se presta a los municipios de la región.
El nuevo consejero delegado, decano-presidente del Colegio de Ecoomistas de Madrid desde hace 5 años y vicepresidente del Consejo General de Economistas, llega para impulsar los retos de sostenibilidad y compromiso medioambiental alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y hacer de la innovación un elemento diferencial fomentando la investigación en el ciclo integral de agua. Dedicará una especial atención a los municipios de la región que forman parte del accionariado de Canal, sirviendo a los ayuntamientos y a la Comunidad de Madrid de apoyo en el desarrollo de políticas medioambientales, con el compromiso de reducir el impacto medioambiental.
En materia de buen gobierno, el nuevo equipo aplicará las mejores prácticas de gobierno corporativo, desplegando la cultura de la ética en toda su extensión, desde la involucración con grupos de interés, el carácter colaborador y la transparencia, hasta la diversidad y la inclusión, según el Canal de Isabel II.
Pascual Fernández es Doctor en Ciencias Económicas y Empresariales y cuenta con una amplia experiencia en la gestión de empresas públicas y privadas, habiendo sido consejero en RENFE, Instituto de Crédito Oficial y empresas de energías renovables como GAMESA Corporación Tecnológica SA, ENCE Energía y Celulosa SA, entre otras. Como Secretario de Estado de Aguas y Costas fue responsable de nueve Confederaciones Hidrográficas y 12 sociedades estatales, con una estructura de personal de 9.000 funcionarios y personal laboral. Entre sus funciones ejecutivas destacan también las Direcciones Generales de Tributos en la Junta de Castilla y León y en la Comunidad de Madrid, así como la Dirección de Análisis y Programación Presupuestaria, que gestionó los fondos comunitarios y los incentivos regionales desde el Ministerio de Economía Hacienda. Actualmente es Decano del Colegio de Economistas de Madrid, vicepresidente primero del Consejo General de Economistas de España; profesor titular de Economía Aplicada en la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) y codirector de la Cátedra UNESCO-URJC-UNED para el Agua y la Paz.
Por su parte, Carmen Tejera, que asumirá la Secretaría General Técnica y la Secretaría del Consejo de Administración de la compañía, es abogada del Estado y su nombramiento supone un refuerzo de la función jurídica en la empresa. Tejera posee una dilatada experiencia profesional y ha ocupado distintos puestos en la Administración Pública como en el Ministerio de Hacienda o en la Abogacía del Estado del Tribunal Supremo donde ha estado desempeñando su actividad hasta su actual nombramiento.
El Canal de Isabel II resalta en su página web que ha sido, es y será una empresa completamente pública. En su accionariado está representada la Comunidad de Madrid, a través del Ente Público Canal de Isabel II (82,40 % del capital), y 111 ayuntamientos de la Comunidad de Madrid (el restante 17,6%, del cual un 10% procede del Ayuntamiento de Madrid). Tiene como cometido la prestación de los servicios de abastecimiento, saneamiento y reutilización, incluyendo la atención a los usuarios y la actividad comercial.
El profesor Pascual Fernández Martinez inició su docencia en la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), desde la que hace dos décadas tuvo una participación destacada en el primer curso de verano sobre el Desarrollo sostenible y sus indicadores, organizado para conmenorar los diez años de la Cumbre de la Tierra en Río (1992), donde se elaboraron los primeros indicadores para cuantificar ese concepto de desarrollo ampliado desde lo económico lo mediambiental, lo social y lo intergeneracional, actualmente plasmados en los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 de Naciones Unidas.
En la UAM, donde sigue colaborando en varios proyectos, el profesor Pascual Fernández participó el año pasado en la presentación del informe Ciudades sostenibles: La huella hídrica de la edificación, en un acto Organizado por el Observatorio UAM – Vía Célere con la FUNDACIÓN COTEC que presidente la exministra socialista Cristina Garmendia y donde participan las principales empresas españolas con actividades de I+D+I
Ese proyecto innovador permite estimar la huella hídrica de una promoción residencial lo que supone mover la frontera del conocimiento y el primer paso para evaluar cómo se puede optimizar el consumo de agua a la hora de edificar y dar respuesta a aquellos retos globales encaminados a crear ciudades más sostenibles.
La Universidad Autónoma de Madrid tradicionalmente ha mostrado un especial interés y compromiso con la sostenibilidad ambiental, tal como lo demuestra la creación en 1997 del Proyecto ECOCAMPUS, estructurado en torno a dos grandes líneas de actuación: la mejora de la situación ambiental de los diferentes campus y equipamientos de la UAM, y la sensibilización de la comunidad universitaria para impulsar la participación e intervención en el debate y la búsqueda de soluciones a los conflictos ambientales globales y locales.
Es precisamente dentro de esta segunda línea de actuación, que recoge explícitamente el objetivo de fomentar la investigación en sostenibilidad, donde se enmarca el Observatorio UAM – Vía Célere para la sostenibilidad ambiental de la edificación residencial.
Vía Célere es una compañía inmobiliaria especializada en el desarrollo, inversión y gestión de activos residenciales, que desde su inicio ha apostado claramente por un innovador modelo de negocio que le ha convertido en una de las empresas de referencia en el nuevo entorno y ciclo inmobiliario. La sostenibilidad ambiental es uno de los focos fundamentales de su estrategia de responsabilidad social y su compromiso con un modelo de edificación que contribuya a crear ciudades y entornos urbanos más sostenibles, en línea con la Nueva Agenda Urbana y los ODS.
Con el fin de poner en marcha el funcionamiento efectivo del Observatorio, la FUAM solicitó la colaboración del Instituto Universitario “L.R.Klein”, que acumula una trayectoria de más de 25 años de experiencia en la realización de todo tipo de análisis cuantitativos, y que le convierten en un candidato idóneo para la realización de estudios específicos del impacto ambiental de las actividades de construcción residencial.
