Los documentos de matrícula aportados este lunes por eldiario.es niegan que "fue tratada como cualquier otra alumna de la Universidad" y "no recibió ningún trato de favor", palabras de defensa pública del supuesto director de su máster, Enrique Álvarez, ante el Rector de la URJC cuando eldiario.es destapó el escándalo de sus notas falsificadas. Exactamente lo mismo defendió Cifuentes el pasado lunes al anunciar una querella contra eldiario.es.
Las clases del máster de Cifuentes arrancaron el jueves 22 de septiembre de 2011, según ha podido comprobar eldiario.es de fuentes universitarias y confirman también alumnos de este mismo curso. El máster era presencial y el horario intenso: jueves por la tarde, viernes por la tarde y sábado por la mañana, desde septiembre de 2011 hasta finales de junio de 2012; entre 12 y 15 horas semanales. Cada asignatura contaba por 3 créditos. Había 12 asignaturas en total, más 24 créditos por el trabajo de fin de máster. Según los nuevos créditos ECTS tras el plan Bolonia, Cifuentes tenía que haber invertido unas 1.500 horas entre clases, estudio, trabajo o presentaciones académicas, de lo que al menos hasta el momento no han aparecido documentos justificativos, como tampoco de la presentación y existencia del trabajo fin de máster.
Las clases llevaban ya un trimestre en marcha cuando se formalizó la matrícula de la alumna María Cristina Cifuentes Cuencas en la Universidad Rey Juan Carlos: una universidad pública cuya financiación, como todas las de Madrid, depende en gran medida de la administración que hoy preside. No está aún claro cómo logró matricularse meses después de terminar el plazo legal ni quién se lo permitió.Se trataba de un título oficial del Ministerio de Educación, otorgado por una de las universidades públicas de Madrid, y que Cifuentes necesitaba para presentar la tesis doctoral. Tal y como impone la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (Aneca), en todos los másteres presenciales es obligatoria la asistencia al menos al 80% de las clases. Con un trimestre lectivo menos, este requisito era imposible de cumplir.
Las fechas de su matrícula desmienten una vez más las explicaciones de Cristina Cifuentes. Esas fechas están confirmadas también por los propios documentos que aportó la presidenta de la Comunidad de Madrid para defender que su máster no tenía ninguna irregularidad, tras la primera exclusiva de eldiario.es sobre esas dos asignaturas que habían pasado, dos años después, en 2014, de "no presentado" a "notable
En esta copia de algunos documentos de su expediente, desvelados por la propia Cifuentes, se comprueba con facilidad que la fecha de emisión del pago de su matrícula –es decir, el día en que la Universidad aceptó su solicitud y emitió la factura– es el 21 de diciembre de 2011. Los pantallazos del sistema informático de gestión de alumnos, a los que ha tenido acceso eldiario.es, confirman que estas fechas son las correctas y que por tanto la matrícula de Cifuentes incumplió todos los plazos legales. Es la enésima irregularidad en el título de máster del que presume en su currículum la presidenta de Madrid, que lleva doce días sin dar una explicación coherente ni tampoco ha enseñado su trabajo de fin de máster que, casi dos semanas después, aún sigue sin aparecer.
Fuentes de la Universidad confirman estas fechas y aseguran que esta nueva irregularidad con la matrícula forma parte de la investigación interna que anunció el actual rector, Javier Ramos, tras las informaciones exclusivas de eldiario.es. Otras fuentes de la URJC afirman que la falta de alumnos de posgrado lleva en ocasiones a las universidades a ampliar los plazos de matrícula más allá de los límites oficiales, pero no hasta el extremo de que se acepten matrículas un trimestre después de iniciadas las clases.
eldiario.es también ha preguntado al gabinete de la presidenta de Madrid, donde afirman que esta matrícula extemporánea de Cifuentes es una "práctica habitual en este tipo de estudios de posgrado". Desde el equipo de Cristina Cifuentes defienden que "los plazos de matriculación de Máster suelen ser más abiertos que los de Grados y dependiendo del número de alumnos pueden tener margen para matricular una vez empezado el curso".
El miércoles, Cristina Cifuentes también tendrá que responder a las muchas preguntas pendientes sobre su máster en un pleno extraordinario de la Asamblea de Madrid. La última vez que se explicó, a través de un plasma en la sede del PP en Génova –el mismo plasma que usó Mariano Rajoy cuando escapaba del caso Bárcenas–, lo hizo para anunciar una "querella criminal" contra eldiario.es.
Cifuentes no fue a clase ni antes de pagar la matrícula ni tampoco después. Los cinco alumnos de este curso que han hablado –una cuarta parte del total de matriculados– confirman que nunca vieron a la hoy presidenta autonómica en las clases. Varios de ellos aseguraron a eldiario.es que se habían enterado hace escasos días, por esta investigación periodística, de que compartieron curso, hace cinco años, con quien hoy preside la Comunidad de Madrid.