Para este mensaje de renovación de la Monarquía, apuntado por Ibercampus en sus primeros titulares y reafirmado en los primeros editoriales de la prensa, el nuevo Rey colocó en funciones destacadas o retos de la etapa al "conocimiento, la cultura y la educación". Felipe VI proclamó que el siglo XXI "será también el del medio ambiente" y subrayó la necesidad de evitar "las discriminaciones" y afianzar "el papel de la mujer".
Aunque el presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, y el lehendakari, Inigo Urkullu, respondieron con la frialdad de un breve aplauso protocolario, al igual que diputados y senadores de CIU y PNV, Don Felipe terminó su discurso de proclamación en las cuatro lenguas oficiales del país, tras citar a Antonio Machado, Espriu, Aresti, Castelao y Cervantes, y utilizar de este una idea igualitaria puesta en boca de Don Quijote: "No es un hombre más que otro si no hace más que otro".
"Hoy puedo afirmar ante estas cámaras, y lo celebro, que comienza el reinado de un Rey constitucional", proclamó. En un discurso de 25 minutos, Don Felipe dijo que buscará "la cercanía con los ciudadanos" y subrayó que "la Corona debe observar una conducta íntegra, honesta y transparente". Además, reafirmó su "fe en la unidad de España" -"unidad que no es uniformidad", matizó-, basada en "la igualdad de los españoles, en la solidaridad entre sus pueblos y el respeto a la ley".
En su declaración de intenciones, Don Felipe destacó el papel de árbitro de la Corona. "La independencia de la Corona, su neutralidad política y su vocación integradora ante las diferentes opciones ideológicas, le permiten contribuir a la estabilidad de nuestro sistema político, facilitar el equilibrio con los demás órganos constitucionales y territoriales, favorecer el ordenado funcionamiento del Estado y ser cauce para la cohesión entre los españoles". El monarca aseguró que en el desempeño de sus funciones los españoles encontrarán "a un Jefe del Estado leal y dispuesto a escuchar, a comprender, a advertir y a aconsejar; y también a defender siempre los intereses generales". Y añadió que los ciudadanos piden "ejemplaridad" a la Corona porque solo de esa manera "se hará acreedora de la autoridad moral necesaria" para el ejercicio de sus funciones. "Los ciudadanos demandan con toda razón que los principios morales y éticos inspiren, y la ejemplaridad presida, nuestra vida pública. Y el Rey, a la cabeza del Estado, tiene que ser no sólo un referente sino también un servidor de esa justa y legítima exigencia de todos los ciudadanos".
Homenaje a sus padres
El nuevo monarca tuvo palabras de "homenaje, gratitud y respeto" hacia su padre, que no asistió a la ceremonia de proclamación para no restarle protagonismo. "En la persona del Rey Juan Carlos rendimos hoy el agradecimiento que merece una generación de ciudadanos que abrió camino a la democracia, al entendimiento entre los españoles y a su convivencia en libertad", señaló. Y añadió que "un reinado excepcional pasa hoy a formar parte de nuestra historia con un legado político extraordinario". También elogió la labor desarrollada por su madre, la Reina Doña Sofía, por "toda una vida de trabajo impecable al servicio de los españoles".
La crisis económica y el problema del desempleo también tuvieron cabida en su discurso, con especial mención a los jóvenes en paro. "Quiero también transmitir mi cercanía y solidaridad a todos aquellos ciudadanos a los que el rigor de la crisis económica ha golpeado duramente hasta verse heridos en su dignidad como personas. Tenemos con ellos el deber moral de trabajar para revertir esta situación y el deber ciudadano de ofrecer protección a las personas y a las familias más vulnerables". Y al igual que su padre hiciera durante años, Don Felipe tuvo ayer palabras de recuerdo y homenaje para las víctimas del terrorismo, con cuyos representantes se reunirá mañana en el que será su primer acto oficial como jefe del Estado. "Su recuerdo permanecerá en nuestra memoria y en nuestro corazón. Y la victoria del Estado de Derecho, junto a nuestro mayor afecto, será el mejor reconocimiento a la dignidad que merecen". El nuevo Rey terminó su discurso dando las gracias a los presentes en español, catalán, euskera y gallego.
Tras ser proclamado Rey, Don Felipe, acompañado de su esposa la Reina Doña Letizia, recorrió en un coche descubierto las calles que separan el Congreso del Palacio Real, donde los monarcas ofrecieron una recepción oficial a la que fueron invitadas cerca de 3.000 personalidades de la política y de la sociedad española en su conjunto, entre los que se encontraban representantes del mundo de la cultura, el deporte o la ciencia. Tras ser aclamados por miles de ciudadanos en las calles de Madrid, los monarcas y sus hijas Leonor y Sofía salieron al balcón del Palacio Real para saludar a los congregados. Posteriormente, Don Juan Carlos y Doña Sofía se unieron a los nuevos Reyes para saludar también a los ciudadanos.
Rajoy destaca la normalidad de la sucesión
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, destacó ayer la normalidad con la que se ha producido la sucesión en el trono. "Demuestra que en España hay leyes que funcionan, hay una Constitución que se cumple y hay unas situaciones normales. Nunca jamás en la historia de España la sucesión en la Jefatura del Estado se había hecho con la tranquilidad con la que se ha hecho esta, y pienso que esto es reconfortante", declaró Rajoy. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, dijo que el discurso pronunciado por Don Felipe en su proclamación como Rey tiene "mucha idea de futuro", y defendió que "nos abre un tiempo nuevo por su propio carácter y espíritu".
El Comité Ejecutivo del PP mostró ayer su confianza en que Felipe VI "seguirá siendo un punto de encuentro de todos los españoles y símbolo de nuestra convivencia". En declaraciones a la prensa, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, destacó "las cosas buenas", "la ·estabilidad" y "los años de paz duradera y convivencia en democracia entre todos los pueblos de España" que, a su juicio, ha propiciado la Monarquía.
Desde el PSOE, calificaron de "acertado" el discurso pronunciado por Don Felipe, sobre todo su compromiso con la monarquía constitucional y su deseo de encarnar la renovación "en un tiempo nuevo". A juicio de la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, el discurso del monarca fue "completo, profundo y cercano". El diputado Alfonso Guerra destacó la referencia a la unidad de España. En la misma línea, el expresidente del Congreso José Bono se mostró confiado en que el nuevo monarca ayude a evitar la secesión de Cataluña, que, según dijo, sería "una ruina" para todos y que solo interesa a "cuatro neuróticos".
Entre quienes no asistieron a la proclamación de Felipe VI, el coordinador federal de IU, Cayo Lara, dijo que su discurso había sido "vacío, tópico y lleno de lugares comunes y propio de un funcionario del poder". El presidente de Sortu, Hasier Arraiz, concluyó que "con el cambio de un Borbón por otro, nada de lo fundamental va a cambiar". El BNG calificó de "inmovilista" el mensaje del nuevo monarca.
Mas: "no dice nada nuevo"
El presidente de la Generalitat, Artur Mas, aunque finalmente acudió al acto de proclamación de Felipe VI, no aplaudió su discurso. "No he aplaudido porque no he visto reflejado en el discurso que empezara un tiempo nuevo", declaró. Según explicó, le hubiera gustado que el Rey hubiera hablado de un "estado plurinacional" y del reconocimiento "de naciones". "Hay que dejar al nuevo Rey que se instale, que tome las riendas del Estado, a partir de ahí estoy a disposición del Rey para iniciar un diálogo, igual que estoy a disposición del presidente del Gobierno si quiere retomar el diálogo", señaló.
Por otra parte, el presidente de la patronal catalana Foment, Joaquim Gay de Montella, solicitó ayer al nuevo monarca que reconozca que "Cataluña es una nación". "Hoy, una mayoría de ciudadanos demanda poder decidir mediante votación directa qué relación quiere con estas instituciones y símbolos del Estado. A lo mejor es necesario dar respuesta a esta demanda social mediante un gran acuerdo dentro del marco de la legalidad vigente", señaló en un acto organizado en Oviedo por la Federación Asturiana de Empresarios.
El presidente de La Caixa, Isidro Fainé, celebró las palabras de un Rey valiente, comprometido e ilusionado", de cuyo discurso resalto que dijera que la unidad no es uniformidad, sino que es unidad en la diversidad". "Ésa es nuestra principal riqueza", afirmó. Según Fainé, Don Felipe pronunció "un mensaje lleno de gestos y sensibilidad, ofreciendo una imagen valiente (…) de responsabilidad y compromiso ante el reto que tiene por delante, pero de confianza e ilusión en el futuro", concluyó.
Desde el PNV, su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, lamentó que el nuevo monarca no usara el término "nacionalidades". En su opinión, el discurso pronunciado por Don Felipe es "más de lo mismo". "Lo podía haber hecho perfectamente su padre", afirmó.
Manifestaciones y detenidos por la República
Miles de personas se manifestaron ayer a favor de la República en Madrid y otra veintena de ciudades. En la mayoría de las concentraciones no se registraron incidentes, sin embargo, en la convocada por la Coordinadora 25-S en la tarde de ayer en la madrileña Puerta del Sol hubo cuatro detenidos después de que la Policía cargara contra unos 250 manifestantes que habían roto el cordón policial. Entre los detenidos se encontraba el exlíder de AP Jorge Vestrynge. Por la mañana, otras tres personas fueron detenidas por resistencia a la autoridad en una concentración republicana celebrada en la plaza Tirso de Molina.
La Policía tenía orden de impedir que manifestantes con pancartas accedieran a los aledaños del Congreso de los Diputados y al recorrido que los Reyes realizaron antes y después de la ceremonia de proclamación. Alrededor de 500 personas, algunas con la boca tapada con esparadrapos en los que se podía leer "libertad", protestaron porque la Delegación del Gobierno había prohibido que se celebrase una manifestación republicana convocada a la misma hora que la proclamación de Felipe VI.
Líderes de todo el mundo felicitan al nuevo Rey
Gobierno y personalidades de todo el mundo felicitaron a Felipe VI en el día de su proclamación como nuevo Rey de España. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, envió un mensaje al nuevo monarca manifestándole su deseo de "trabajar estrechamente con él" para "continuar fortaleciendo" el vínculo entre sus respectivos países.
El presidente chino, Xi Jinping, felicitó a Felipe VI y destacó la "enorme importancia" que el país asiático da a España, socio clave en la Unión Europea. "Bajo el liderazgo del nuevo Rey, España continuará prosperando y progresando", afirmó en una rueda de prensa en la que subrayó que las relaciones entre ambos países han registrado "muchos cambios positivos". El presidente ruso, Vladimir Putin, remitió al Rey un mensaje en el que, según informó el Kremlin, expresa" su deseo de que las relaciones entre Rusia y España sigan desarrollándose de forma fructífera en la línea con la amistad y el respeto mutuo habido durante el mandato de Juan Carlos I".
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, subrayó en un mensaje que la proclamación del rey Felipe VI "llega en un momento de importantes retos para España y para la Unión Europea, retos que el nuevo rey, por su personalidad y su preparación sabrá sin duda afrontar". En un comunicado, el presidente permanente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, deseó "toda la suerte" a Don Felipe y rindió homenaje a Don Juan Carlos, del que destacó "el trabajo llevado a cabo (…) en la consolidación de la democracia en España", que, según señaló, "constituyó una contribución definitiva al proyecto europeo".
El presidente de Francia, François Hollande, saludó con respeto la figura del nuevo Rey. "Una nueva página se abre en la historia, en un momento en el que España, que ha pagado un pesado tributo a la crisis y ha consentido esfuerzos muy dolorosos, inicia su recuperación. Felipe VI recibirá, los españoles pueden estar seguros de ello, la amistad y toda la confianza que Francia tenía en su padre y estará indefectiblemente a su lado".
