Según destaca la prensa con motivo de su proclamación, el nuevo rey es el primer monarca polígloto, pues maneja el inglés, el francés, además del gallego, catalán y euskera. En su discurso de proclamación remarcó su importancia, diciendo que “las lenguas constituyen las vías naturales de acceso al conocimiento de los pueblos y son a la vez los puentes para el diálogo de todos los españoles”. También expresó la misma consideración respecto a las tecnologias de la información, la universidad y el libro tradicional.
La prensa le atribuye pasión por la Física, la Química y la astronomía a la hora de explicar su inclinación por el fomento de la investigación, además de las razones estatales. En muchas ocasiones ha destacado el papel de la formación y la I+D+I en la recuperación del empleo y el crecimiento del país, y concretamente en su discurso de proclamación resaltó que “tenemos ante nosotros el gran desafío de impulsar las nuevas tecnologías, la ciencia y la investigación, que son hoy las verdaderas energías creadoras de riqueza; el desafío de promover y fomentar la innovación, la capacidad creativa y la iniciativa emprendedora como actitudes necesarias para el desarrollo y el crecimiento”, para “asegurar el progreso y la modernización de España y nos ayudará, sin duda, a ganar la batalla por la creación de empleo”.
Consideración de la universidad
Felipe VI considera, a la luz de sus discursos, que las instituciones académicas son las que deben garantizar el conocimiento y la investigación, por lo la Universidad debe continuar una comunicación estrecha y permanente con la realidad social en su más amplio sentido, para que “pueda ser aprovechado de la forma más rápida y eficaz posible en beneficio de todos".
En diversas ocasiones ha instado a la Universidad española a trabajar en favor de una incorporación “más rápida y plena” de sus alumnos al mercado laboral y contribuir así a resolver el “lamentable desempleo juvenil”. Además, considera que es importante continuar dedicando esfuerzos para que los resultados y el reconocimiento de la Universidad española “crezcan sin cesar, tanto internamente como a escala internacional”, un ámbito en el que, en su opinión, “quizás se requiere un mayor impulso”.
Felipe VI ha destacado como Príncipe que la universidad “ahora forma íntegramente a las personas, ejerce la docencia, desarrolla la investigación y promueve la transferencia de conocimiento”. Por ello la animó a “consolidar estos avances, profundizando en el desafío del crecimiento inteligente, sostenido e integrado, y considerando la educación como una contribución decisiva al progreso económico y social”.
Importancia de la lectura
Considerado un ávido lector, Felipe de Borbón en diversas ocasiones ha resaltado también la importancia del libro. En su discurso de abril de 2006 dijo: “Deseamos que España se consolide como un país de lectores, porque así, como reza el eslogan, también lograremos ser un país de ciudadanos más cultos y más libres”.
En Panamá señaló además que el “buen lector” es “alguien dispuesto a dialogar” y, por tanto, “abierto a una discusión razonada de la cosa pública y de los problemas sociales”. Incluso citó a uno de sus autores preferidos, Goethe: “Cuando se lee no se aprende algo; se convierte uno en algo”.