El exconsejero delegado de la Agencia Informática de la Comunidad de Madrid (ICM), José Martínez Nicolás, declaró que al menos en tres ocasiones pidió dinero a Indra – 90.000 euros, 20.000 euros y 10.000 euros – por indicación del consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid Salvador Victoria para saldar deudas con diferentes personas, entre ellas el empresario Alejandro de Pedro, uno de los principales implicados en la trama Púnica.
El expresidente de Indra Francisco Javier Monzón negó los supuestos pagos solicitados por Martínez Nicolás al director general de Indra, Santiago Roura. "En mi empresa todo se hace por transferencia, no hay pagos en efectivo no con cheques", explicó, aunque sí admitió una llamada de Nicolás a Roura "para pedirle 10.000 euros porque se lo debían" a De Pedro.
Por otra parte, varios trabajadores de una de las empresas de De Pedro admitieron que los supuestos trabajos de pressclipping que el Gobierno regional contrató en realidad escondían otros encargos, como minimizar en internet noticias negativas de cargos del PP, como las informaciones sobre el ático de Ignacio González en Marbella o sobre el cheque escolar al hijo de la consejera de Educación, Lucía Figar.
Los diarios también reflejan otras irregularidades relacionadas con la red Púnica que han salido a la luz en los interrogatorios. Por ejemplo, que la multinacional francesa Cofely, a través de amaños administrativos, sobornaba a alcaldes de distintas localidades madrileñas para conseguir contratos y regalaba a los Ayuntamientos encuestas políticas enmascaradas en supuestas encuestas de satisfacción por los servicios que prestaba.
ABC destaca en portada "el mayor contrato de la Púnica". Un pinchazo telefónico prueba cómo el exalcalde de Parla José María Fraile organizó una mordida de 1,3 millones de euros al adjudicar en 2013 el mantenimiento eléctrico municipal a Cofely, que elaboró ella misma los pliegos del concurso público y la auditoría, por la que recibió un pago de 60.000 euros. "Cuando cobre la empresa, cobramos todos: cobran ellos, cobras tú, cobro yo", le dijo uno de los implicados a otro.
Los periódicos también resaltan que varios testigos coinciden en señalar a David Marjaliza, amigo y empresario vinculado a Francisco Granados, como una de las personas más influyentes en varios ayuntamientos, entre ellos el de Valdemoro y el de Torrejón de Velasco.
Otro aspecto destacado es el interrogatorio al presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, quien contrató a una de las empresas de De Pedro durante un año, a la que pagó 300.000 euros, para agrupar el seguimiento de las redes sociales del club y mostrar su posicionamiento a nivel mundial, aunque negó que se realizaran trabajos para mejorar la reputación del Real Madrid o de sus jugadores, así como pagos en negro.
