Miles de taxistas de toda Europa protestaron ayer contra los servicios de transporte para compartir vehículo ofrecidos a través de internet o de aplicaciones móviles, en una jornada de huelga y movilizaciones en las principales ciudades del continente. La prensa destaca el amplio seguimiento de la protesta en Madrid y Barcelona, donde se produjeron importantes atascos y algunos altercados por la actuación de piquetes.
La ministra de Fomento, Ana Pastor, reclamó a Bruselas que aclare la normativa y establezca una regulación común "con el objetivo de tratar a estas plataformas de la manera más homogénea posible", según fuentes del Ministerio. Pero los taxistas temen que la decisión europea irá contra sus intereses, pues la Comisaria europea está en favor de las aplicaciones de viajes compartidos.
En efecto, la vicepresidenta de la Comisión Europea y comisaria de Agenda Digital, Neelie Kroes, advirtió en su blog: "La tecnología digital está cambiando muchos aspectos de nuestras vidas. No podemos abordar estos retos ignorándolos, haciendo huelga o intentando prohibir estas innovaciones". Mientras que los taxistas consideran que herramientas como Uber, Blablacar, DJump, Taxipal, Taxify o Hailo (muy usadas en las universidades españoles) suponen una actividad ilícita y son "competencia desleal", la comisaria encargada de las telecomunicaciones señaló que este tipo de tecnología "elimina algunos puestos de trabajo y cambia otros, pero mejora la mayoría y crea nuevos empleos". "No podemos criminalizar a toda una clase de ciudadanos o alejar a los turistas de lugares que necesitan ingresos en aras de proteger a unas cuantas industrias que creen que pueden quedar al margen de la revolución digital", indicó.
La ministra Ana Pastor solicitará una reunión entre Kroes y el comisario de Transporte, Siim Kallas, para solucionar el conflicto a nivel comunitario. Desde el Ministerio de Fomento descartaron negociar con las empresas. "El Gobierno legisla por el interés general y no por la vía de los hechos consumados", aseguraron, y consideraron que no es necesaria una "legislación adicional", aunque sí sería conveniente que la Comisión interviniera para "homogeneizar" el tratamiento a este tipo de empresas.
El máximo responsable de Uber (la aplicación principal) en Europa, Pierre Dimitri Gore-Coty, consideró que el sector del taxi "no ha tenido competencia durante décadas" y ahora arremete contra compañías que "añaden más opciones" para que los clientes elijan porque se siente "amenazado". Precisamente ayer, aprovechando la atención mediática generada por la protesta de los taxistas, Uber lanzó una oferta de un 50% de descuento para sus clientes en viajes compartidos mientras duren los paros en Barcelona, única ciudad española en la que opera por el momento. A pesar de que la Generalitat anunció que pedirá a esta empresa que cese su actividad y que castigará las infracciones de la normativa de transporte de viajeros con multas de hasta 6.000 euros, ayer Uber fue una de las aplicaciones más descargadas.
Primeras valoraciones de la prensa
Las primeras valoraciones de la prensa tienden a confirmar la derrota de los taxistas en huelga ante aplicaciones que se consideran imparables, aunque los medios no aclaran cuál será la actitud de los reguladores europeos o nacionales a la hora d einclinar la balanza por los nuevos sitemas o el taxi tradicional. He aquí un resumen de editoriales:
Taxistas en pie de guerra (LA VANGUARDIA): "El transporte urbano o interurbano regulado de pasajeros se suma así a la larga lista de sectores heridos por internet y por las nuevas tendencias de consumo que se derivan de la expansión de la red".
El intrusismo pone en pie de guerra a los taxistas (EL PERIÓDICO): "El conflicto no se cerrará solo con mano dura y quizá precise de cambios normativos para incluir a los intrusos y obligarles a cumplir los requisitos legales y fiscales como los demás".
Competencia, precios y seguridad (CINCO DÍAS):"El Gobierno solo debe fijar y vigilar estándares de seguridad, y someter a la fiscalidad general cada hecho en el que medie lucro".
Los taxistas se quejan contra un atropello (LA RAZÓN):"Un auténtico atropello que pone en peligro el presente y el futuro de un colectivo que ya soporta no pocas cargas y que merece respuestas".
