Los proyectos, seleccionados por el Consejo Europeo de Investigación (ERC), recibirán subvenciones comunitarias destinadas a "salvar la distancia entre la investigación pionera que a priori no tiene aplicación práctica y la innovación comercializable", según informó el Ejecutivo comunitario en un comunicado.
En particular, las ayudas podrán emplearse en aplicaciones comerciales y societarias como la gestión de derechos de propiedad intelectual, la investigación de oportunidades de negocio o la validación técnica.
En la primera convocatoria de este tipo de becas, que tienen un presupuesto total de 10 millones de euros, las ayudas han ido a parar a 15 estados miembros diferentes, España entre ellos.
Uno de estos proyectos, llevado a cabo por la Universidad de Lleida, investiga variedades de maíz con "multinutrientes" para aumentar la seguridad alimentaria; mientras que la Universidad de Girona recibirá otra beca para el desarrollo de catalizadores "bio-inspirados" y con aplicación comercial.
La Universidad de Barcelona será la destinataria de otra ayuda para su proyecto "Sistema para experiencias relacionales personificadas", así como el Instituto de las Ciencias Fotónicas (ICFO), para el desarrollo de nuevos sensores de imagen con tecnología de grafeno.
Los proyectos financiados por la UE cubren áreas que van desde la neurociencia y la ingeniería hasta la arquitectura y los derechos humanos, según la CE, que destaca ejemplos concretos como el desarrollo de una tableta-PC capaz de detectar cuándo un paciente sale del estado de coma e informar a personal sanitario y familiares.
El ERC abrirá otra convocatoria hasta el próximo 3 de octubre, según informó la Comisión Europea.