El objetivo final de esta investigación llevada a cabo por el OES es el de ofrecer un análisis que sirva de orientación a las Empresas de Inserción a la hora de utilizar estos canales estimulando su óptima utilización y mejorando su competitividad.
Desde el OES, se enfatiza en “la importancia de las empresas de inserción como motores del cambio para la integración laboral de los colectivos más vulnerables debido a las nuevas oportunidades que ofrecen a estas personas mediante la formación y el trabajo”. Y a su vez, en como “el auge de la web 2.0 y la fuerte implantación en toda la sociedad de las redes sociales ofrece un marco idóneo para el crecimiento de estas empresas gracias a su fuerte carga de componente social, un aspecto que genera interés entre los usuarios de las redes sociales y al bajo coste de su utilización”.
Este estudio ofrece datos reveladores sobre las oportunidades que las redes sociales ofrecen a las empresas mostrando un enorme potencial de generación de negocio, si bien hasta el momento muy pocas empresas les están sacando el rendimiento que se ajuste a estas expectativas y las están utilizando adecuadamente. En este sentido, nos encontramos que aquellas empresas de inserción que publican de forma regular y dinamizan su comunidad en Facebook y aquellas que realizan acciones estratégicas en Twitter logran captar a un número de seguidores 5 y 10 veces superior al resto respectivamente.
Según Anna Carballo, directora del Observatorio de Economía Solidaria, las empresas de inserción “son entidades que se muestran activas en las redes sociales, pero no proactivas, ya que responden a sus usuarios pero no van a buscar nuevos seguidores y lanzan comunicados regularmente pero sin estar sustentados aparentemente por ningún tipo de estrategia 2.0 o simplemente de estrategia comercial”. Un marco de actuación en el que se debe tener en cuenta, según palabras de Carballo, que “la mitad de ellas todavía no han dado el paso y no tienen presencia en ninguna red social”.