Esos compromisos de menor integración en cuanto al movimiento de personas, mercancías y capitales, pactados para la permanencia británica, ya no vinculan a la Unión Europea. Pero el impacto del nuevo problema causado por el aislacionismo británico será negativo a corto plazo para toda Europa y todo el mundo, aunque no tanto como para el propio Reino Unido, donde las encuestas indicaban que dos terceras partes de los jóvenes mejores de 30 años eran partidarios de permanecer en la UE, mientras que el si al Brexit se concentraba en los de más edad.
Aún hay que esperar al recuento definitivo para conocer el porcentaje final, que será comunicado esta mañana. Según el pronóstico de la BBC, un 52% de los británicos votó a favor de salir de la UE, contra un 48% que se inclinó por la permanencia. De inmediato los mercados financieros reaccionaron negativamente. Las bolsas asiáticas se desplomaron tras conocer el adelanto de la BBC. Tokio se hundió más de un 8%. Por su parte, la libra cotiza en su nivel más bajo de los últimos 30 años.
El eurófobo Nigel Farage, líder del Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP), calificó la jornada como "el día de la independencia", y afirmó que se trata del triunfo de gente "decente" que se ha enfrentado a las grandes corporaciones y los bancos, que pedían la permanencia británica en la UE.
La evolución del recuento ha sorprendido tras una frenética noche electoral marcada por la incertidumbre. La primera encuesta divulgada tras el cierre de los colegios electorales daba la victoria a los partidarios de permanecer en la Unión Europea por cuatro puntos. Incluso Farage llegó a admitir que el Reino Unido había votado por permanecer en la UE. Sin embargo, el desarrollo del escrutinio fue inclinándose hacia los partidarios del Brexit.
Las primeras ediciones de los diarios destacaban la importancia del referéndum y sus posibles consecuencias. "Ser o no ser europeos", titula ABC en su primera, mientras que LA RAZÓN alude a "la hora de Europa". LA VANGUARDIA ve a "Europa, en vilo por el voto del Reino Unido" y EL PERIÓDICO habla de "embrollo británico". Según EL PAÍS, "el referéndum británico fuerza a Europa a acometer cambios". Por su parte, EL MUNDO resalta la participación en la cita: "Los británicos se vuelcan en el referéndum sobre el Bréxit".
En sus páginas económicas, los diarios mostraban el optimismo de los mercados europeos ante un resultado que aventuraban como favorable a la continuidad del Reino Unido en la Unión Europea. Pero los recuentos no han seguido los deseos y apuestas de la mayoría de los medios financieros y de las grandes empresas, como tampoco de los principales dirigentes de la Comisión y del Consejo Europeo, que realizaron polémicas concesiones a Cameron para que este pudiera ofrecer a su opinión pública grandes contrapartidas a la permanencia del Reino Unido.