jueves,18 agosto 2022
Espacio euroiberoamericano de diálogo sobre la innovación social, profesional y académica
InicioSociedad, Política y SostenibilidadPolíticas y ODSMerkel y Macron suavizan el aislamiento global de Trump ante las otras...
El presidente francés convocará otra cumbre del clima

Merkel y Macron suavizan el aislamiento global de Trump ante las otras 19 grandes potencias

Redacción
Los líderes del G20 reunidos en Hamburgo lograron cerrar este sábado una declaración final en la que se comprometen a "luchar contra el proteccionismo" comercial pero también contra las prácticas desleales con instrumentos "legítimos" de defensa comercial, una fórmula para salvar el último escollo que alejaba a Estados Unidos de la mayoría de socios. "Cuando no hay consenso, hay que reflejar el disenso, no ocultarlo", admitió la canciller Merkel, quien fue secundada por Macron en ayudar a Trump.

La prensa española en sus primeras valoraciones editoriales de la cumbre confirma el aislamiento de Trump vaticinado por Ibercampus. El G-20 respalda el libre comercio y Trump se aísla (EL MUNDO), 

Merkel se impone a Trump en el G-20 (LA VANGUARDIA). ..

"Diecinueve contra uno. Ese ha sido el resultado de la cumbre del G-20 celebrada en Hamburgo y que ha dejado negro sobre blanco el creciente autoaislamiento de EE UU", resume la crónica de EL PAÍS.  Sin embargo, la canciller Merkel ha logrado algunos avances sectoriales con los EEUU que figuraban entre sus objetivos prioritarios, bajo el lema de que juntos podemos conseguir más.

El texto íntegro del documento de conclusiones de la reunión, en la que el cambio climático ha ocupado lugar central, destaca que 19 miembros del club de los países industrializados y emergentes secundan el Acuerdo de París de lucha contra las emisiones contaminantes, mientras que EE UU reitera su propósito de abandonar el pacto y defiende los combustibles fósiles.

El documento recoge además que Estados Unidos trabajará estrechamente con otros países para "ayudarles a acceder y usar energías fósiles de manera más clara y evidente", una reivindicación del presidente Donald Trump, incompatible con los compromisos del acuerdo internacional sobre clima de París, que el resto de países se compromete a cumplir y aplicar "plenamente", excepto Turquía, que a última hora de la noche sorprendió a todas las delegaciones anunciando su decisión de no ratificar dicho pacto.Esta última frase del documento es la que más dificultades provocó debido a la resistencia de muchos países a respaldar la energía más contaminante. Finalmente se incluyó, pero dejando claro que se trataba de la postura de Washington.

"En mi encuentro con Merkel y Macron les dije que mientras la promesa que se nos hizo no se mantenga y no sean levantadas las sanciones a Turquía, no ratificaremos el acuerdo de París en nuestro Parlamento", señaló el mandatario turco Erdogan. El presidente francés, Emmanuel Macron, comunicó por su parte que convocará una nueva cumbre del clima en París para finales de año, a la que estarán invitados tanto Estados Unidos como Turquía, pues piensa que aún es posible convencer a Trump de que de marcha atrás y suscriba el pacto de París.

A modo de balance de la cumbre que ayer concluyó en Hamburgo, Angela Merkel dijo estar "muy contenta de que haya sido posible subrayar de manera clara que los mercados deben seguir abiertos y se debe luchar contra el proteccionismo y las prácticas de distorsión y discriminatorias". La canciller alemana reconoció que las negociaciones han sido "difíciles", pero destacó el logro de consensuar un documento que reconoce las divergencias. "Donde no se puede lograr acuerdo se deben expresar las diferencias y eso ha quedado también reflejado", añadió, en alusión a la formulación pactada sobre cambio climático.

Al término de la Cumbre del G-20, y por tercera noche consecutiva, el barrio de Hamburgo de Schanzenviert fue escenario de disturbios, tras concentrarse en la zona miles de jóvenes manifestantes que protestaban contra los acuerdos adoptados.

Durante las últimas semanas, se barajó seriamente la posibilidad de que la cumbre terminara en fracaso ante las diferencias con EE UU. “Ha estado increíble y ha hecho un gran trabajo. Muchas gracias, canciller”, le felicitó Trump, estrella indiscutible de la cumbre. El presidente estadounidense se mostró conciliador en todo momento y mantuvo una esperadísima reunión bilateral con su homólogo ruso, Vladímir Putin en la que hablaron de la presunta injerencia del Kremlin en las elecciones estadounidenses y pactaron un alto el fuego parcial en Siria. Los dos líderes conectaron y durante el encuentro “hubo química”, según la versión de la Administración estadounidense.

“Tomamos nota de la decisión de Estados Unidos de retirarse del Acuerdo de París”, arranca uno de los párrafos del documento final, en el que los negociadores trabajaron hasta las dos de la madrugada del sábado. “EE UU se esforzará por trabajar estrechamente con otros países para ayudarles a acceder y utilizar combustibles fósiles más limpios”.

Los otros 19 miembros del G-20 afirman en el texto que el Acuerdo de París es “irreversible” y  confirman su compromiso para prestar ayuda, incluida la financiera, a los países en desarrollo para que cumplan sus objetivos de cambio climático, según el llamado principio de “responsabilidades comunes pero diferenciadas”. Es decir, el G-20 se hace eco de la contribución histórica de los países industrializados al cambio climático, mucho mayor que la de las naciones en desarrollo. Merkel se mostró satisfecha de que todos los demás mandatarios, salvo Trump, confirmaran su compromiso con el acuerdo de París y se mostraran dispuestos a ponerlo en práctica “lo más rápidamente posible” a través de un plan de acción.

La primera señal de que la unidad del resto de la comunidad internacional en torno al acuerdo contra el calentamiento global podría resquebrajarse la dio el mandatario turco, Recep Tayyip Erdogan, quien aseguró que, tras la retirada de Washington, su país podría no ratificar el acuerdo. Erdogan, que mantiene una tensa relación con Merkel cuyo último episodio fue la negativa del Gobierno alemán a permitirle dar un mitin a la población turca en Hamburgo, dejó claro que su verdadero objetivo es conseguir dinero. Explicó que el entonces presidente francés, François Hollande, le había prometido compensaciones financieras y que si estas no llegan no ratificará el pacto. Turquía está clasificada entre los países desarrollados, que se han comprometido a crear un fondo de 100.000 millones de dólares anuales para financiar la transición a las energías limpias de los no desarrollados.

Guerra del acero

El libre comercio ha sido otro de los temas sobre los que ha pivotado la cumbre de Hamburgo, en la que 19 socios temían que Washington tratara de incluir su credo proteccionista y evitara el acuerdo. El G-20 expresa su voluntad de "luchar contra el proteccionismo, como hizo el oasado junio en Italia,, y apuesta por un libre comercio "justo" y "basado en reglas", al tiempo que se bendice el uso de "instrumentos legítimos de defensa comercial", tal como pretendía la delegación estadounidense. El resultado da cabida a una amplísima interpretación en la que podrían entrar medidas proteccionistas como las que Washington rumia para proteger su siderurgia.

La amenaza de una guerra comercial ha planeado sobre la cumbre de Hamburgo, que se produce bajo la amenaza de Washington de imponer trabas a la importación de acero apelando a razones de "seguridad nacional" inéditas desde tiempos de la Guerra Fría. Para evitarlo, los mandatarios acordaron reconducir a un foro multilateral, la OCDE, el contencioso sobre el acero. No está nada claro sin embargo, que esta iniciativa disuada a Trump. “Hemos fijado un calendario ambicioso, porque si no lo hacemos, nos arriesgamos a medidas unilaterales”, dijo Merkel en la conferencia de prensa en la que explicó las conclusiones de la cumbre y admitió que el acero es solo uno de los frentes comerciales abiertos, pero que hay más

Mariano Rajoy ve respaldadas sus reformas

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, hizo un balance "muy positivo" de la cumbre del G-20. Al término de la reunión, el jefe del Ejecutivo destacó que el resultado es un "mensaje claro contra el proteccionismo", sin olvidar que para ello "todos" deben respetar "las mismas reglas del juego".

En cuanto a la solución hallada en materia de cambio climático, Rajoy se mostró "razonablemente satisfecho" porque recoge el "compromiso colectivo" del G20, también de Estados Unidos pese a su ruptura con París, para "reducir las emisiones de efecto invernadero".

En otro orden de cosas, Mariano Rajoy considera que las reformas emprendidas en España "han sido claramente respaldadas" por el G-20, "después de tres años de crecimiento con valores que superan el 3%". Ahora, subrayó, "hay que perseverar" para alcanzar el objetivo de 20 millones de trabajadores en 2019, un dato que, a su juicio, podrá superarse.

 Editoriales de la prensa española 

El G-20 respalda el libre comercio y Trump se aísla (EL MUNDO): El G-20 de Hamburgo ha escenificado el nuevo orden mundial en el que EEUU ha comenzado a perder peso como líder del planeta y se ha alejado aún más de la UE. Hay que celebrar que los líderes de los países industriales y emergentes se comprometieran a luchar contra el proteccionismo y a mantener los mercados abiertos. La comunidad internacional rechaza así el aislacionismo que predica Trump. Sin embargo, para lograr el acuerdo se ha introducido en el texto un guiño a Washington y matizar que es lícito que cada país tenga "instrumentos legítimos de defensa en el ámbito comercial". El G-20 también evidenció la soledad de Trump ante el cambio climático al ratificar el acuerdo de París, aunque respetando su deseo de matizar que el foro "toma nota" de que EEUU se sale del pacto.

Merkel se impone a Trump en el G-20 (LA VANGUARDIA):La cumbre del G-20 se ha cerrado con la evidencia de que la Administración estadounidense se encuentra aislada. La declaración final de la reunión constata que el acuerdo de París sobre la lucha contra el calentamiento del planeta no tiene vuelta atrás. Trump no solo ha cosechado un fracaso sino que además vuelve a su país con una clara derrota frente a antiguos aliados, con Angela Merkel como anfitriona y cara visible de una UE dispuesta a dar la batalla. De ahí la contundencia de las palabras de la canciller en las que subrayaba que los documentos finales de la cumbre evidencian no sólo los acuerdos sino también el disenso. Nada de subterfugios y menos con Trump. Tampoco Trump ha impuesto sus tesis respecto del comercio global. La guerra entre librecambistas (europeos) y proteccionistas (estadounidenses) ha terminado en tablas. Merkel se ha erigido como la líder más representativa del mercado global, y el acercamiento europeo a China y Japón contrasta con la deriva proteccionista de Trump. Merkel y el grupo europeo han sabido aprovechar con inteligencia los generosos espacios vacíos que Trump va dejando por el mundo.

De interés

Artículos Relacionados

Centro de preferencias de privacidad