jueves,18 agosto 2022
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Preocupados por la Sanidad y la Educación

Ocho de las 17 comunidades suspenden en déficit

Redacción
Las comunidades también acordaron nuevos compromisos en la supresión de hasta 734 entidades del sector público autonómico.

 Las autonomías donde viven más de las tres cuartas partes de la población desaprobaron ayer el nuevo déficit a la carta, en su gran mayoría preocupados por sus recursos para educación y sanidad, principales gastos de esta parte de las administraciones públicas que distribuye un tercio de los presupuestos.

Al día siguiente de conocerse que hasta junio el Estado ha incurrido ya en todo el déficit público previsto para el presente año, el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) aprobó ayer el reparto del déficit autonómico "a la carta" con el voto en contra de Madrid, Cataluña, Asturias y Canarias y la abstención de Aragón, Extremadura, Andalucía y Navarra.

Manteniendo el objetivo conjunto de todas las comunidades autónomas en un déficit del 1,3% este año, habrá diferentes cifras para cada autonomía en función del déficit registrado en 2012, entre otras variables. Así, los límites para 2013 quedan en 1,6% para la Comunidad Valenciana; 1,59% para Murcia; un 1,58% para Andalucía y Cataluña; 1,47% para Baleares; un 1,3% para Castilla-La Mancha y Aragón; 1,27% para Castilla y León; un 1,20% para País Vasco, Navarra, Canarias y Galicia; 1,13% para Cantabria, 1,07% para Madrid; 1,06% para Asturias y La Rioja y un 1% para Extremadura.

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, destacó la "experiencia inédita" en democracia de "déficit asimétricos" y, tras alabar el "importante ejercicio de eficacia" de las comunidades en 2012, aseguró que gracias a ese esfuerzo se han podido sanear las cuentas y que las autonomías "no sean vistas como el problema de las finanzas públicas ni de la crisis".

Por otro lado, el CPFF aprobó los límites de deuda pública para 2013, fijados también en función del volumen de endeudamiento en 2012, que van desde el 31,2% de la Comunidad Valenciana al 11,8% de Madrid. El objetivo es que la deuda del conjunto de las comunidades no supere el 19,13% del PIB este año y el 20% el siguiente.

Las comunidades también acordaron nuevos compromisos en la supresión de hasta 734 entidades del sector público autonómico.

Madrid ve inestable el reparto

El consejero de Madrid, Enrique Ossorio, justificó el rechazo al reparto asimétrico porque "convierte la ley de estabilidad en papel mojado" ya que "premia a la comunidad que ha incumplido y se castiga a la que ha cumplido". Según Ossorio, el 1,07% asignado es "totalmente insuficiente", ya que consolida para ejercicios posteriores la disminución de 1.000 millones de euros de ingresos a cuenta que sufrió la comunidad el año pasado, con lo que el ajuste es mucho mayor que en otras comunidades.

El consejero de Economía catalán, Andreu Mas-Collel, resumió la reunión como "un triunfo de la uniformidad sobre la racionalidad o de la meseta sobre el Mediterráneo". El consejero de Economía de Canarias, Javier González Ortiz, se quejó de que las autonomías prestan "la sanidad y la educación y el mayor déficit se lo queda el Estado, que lastra los servicios públicos esenciales". Para la consejera de Hacienda asturiana, Dolores Carcedo, el Gobierno "ha cambiado las reglas" y sin "ningún análisis previo, discutido o comparado" ha penalizado a Asturias "por haber cumplido con el objetivo de 2012". El consejero de Hacienda de Extremadura, Antonio Fernández, valoró "que se haya premiado el esfuerzo tan grande que Extremadura afrontó en 2012", pese a lo cual han querido expresar su protesta por la asimetría con su abstención.

Montoro pidió dejar de lado "miradas torticeras que no hacen país" entre las comunidades. "No se trata del ni tú más que yo ni yo más que tú", señaló, y subrayó que "es al Gobierno al que le toca esta tarea y no a las comunidades". Sobre el rechazo de Madrid, única comunidad del PP que se ha opuesto al reparto, consideró que "está en su derecho", y recordó que el año pasado votó a favor del objetivo del 1,07% asignado. Sobre el voto en contra de Cataluña, señaló que se trata de una "posición política", ya que esta comunidad pidió el déficit diferenciado.

El consejero de Hacienda de la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Moragues, celebró el nuevo objetivo, que según destacó, dotará a la comunidad de "una liquidez adicional de 900 millones que se utilizarán para pagar a proveedores". La consejera andaluza de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, aseguró que "las medidas adoptadas por la Junta permitirán que se pueda cumplir con los objetivos de déficit fijados por el Ejecutivo hasta 2015".

La noticia en los diarios

Los diarios coinciden a la hora de atribuir a Montoro el "déficit a la carta" y hablan de "rebelión" de la comunidad de Madrid. "Montoro aprueba el déficit a la carta con el rechazo de Madrid y Cataluña", titula EL PAÍS. EL MUNDO abre su portada con este titular: "Habrá déficit a la carta pero Mas ve ´inadmisible´ el 1,58%". ABC destaca que "Madrid rechaza el déficit a la carta que impone Montoro a las regiones". LA RAZÓN subraya que "las regiones incumplidoras podrán tener déficit de más del 1,3%" y apunta que "Hacienda sugirió a Madrid reponer el impuesto de Patrimonio este año".

LA VANGUARDIA destaca en su portada que Cataluña "debe ajustar hasta 2.600 millones este año" y en páginas interiores indica que "Hacienda fija el peor escenario financiero previsto por el Govern". Para EL PERIÓDICO, "Montoro impone otro ajuste de 800 millones a Catalunya". En páginas interiores dice que "Rajoy desdeña la petición de más y exige otro recorte de 800 millones".

CINCO DÍAS dice que "Montoro aprieta a las regiones con severos ajustes fiscales" y EL ECONOMISTA titula: "Montoro se salta la Ley al premiar el exceso de déficit autonómico" de las "autonomías desleales.

Primeras valoraciones editoriales

EL PAÍS critica en su editorial la respuesta de Madrid diciendo que en Europa el mayor margen y el calendario más flexible se otorgan a países incumplidores, como España, no a Finlandia, Luxemburgo o Alemania, que no lo necesitan". "La cuestión de fondo estriba más bien en la escasa credibilidad del Gobierno central para ejercer de árbitro en un tema en el que flaquean sus propios resultados". "Tenían razones sólidas presidentes como el andaluz y el catalán en demandar un margen autonómico de hasta el 2,2%, un tercio del tope del 6,5% al que Bruselas amplió el límite". "Y es que las autonomías representan un tercio del gasto público". Y concluye que Hacienda no predica con el ejemplo y se autoatribuye más holgura que el año anterior.

EL MUNDO presenta la cuestión del déficit a la carta como "discutible", si bien recurda que la UE permite a España un déficit mucho más alto que el de Francia o Alemania". Pero lo que "carece de sentido" es que Hacienda pusiera los mismos objetivos en 2012, este año acepte la asimetría y asegure que en 2014 todas las comunidades tendrán el mismo tratamiento. "No se puede hacer una cosa los años pares y otra, los impares".

Para ABC, es posible que la extrema situación financiera que sufren algunas comunidades justifique, hasta cierto punto, que se les conceda un mayor margen, pero "se trata de una decisión puntual que no debe generalizarse ni mantenerse en el tiempo, puesto que, en el fondo supone premiar a los gestores más díscolos y despilfarradores a costa de castigar a los más austeros y responsables".

Como "Un déficit insuficiente" ve en LA VANGUARDIA José Antich la decision, que juzga así: "Con un reparto más equitativo entre administraciones hoy estaríamos hablando de un escenario político diferente". Pero, el Gobierno prefiere reservarse para él esas décimas de más en parte para financiar indirectamente a las autonomías, una manera de amenazar a aquellas que no cumplen y quedarse con la llave de la caja".

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